El ángel del Señor en Boquín

El ángel del Señor subió de Guilgal a Boquín y dijo: «Yo los saqué a ustedes de Egipto y los hice entrar en la tierra que juré dar a sus antepasados. Dije: “Nunca quebrantaré mi pacto con ustedes; ustedes, por su parte, no harán ningún pacto con la gente de esta tierra, sino que derribarán sus altares”. ¡Pero me han desobedecido! ¿Por qué han actuado así? Pues quiero que sepan que no expulsaré de la presencia de ustedes a esa gente; ellos les harán la vida imposible y sus dioses les serán una trampa».

Cuando el ángel del Señor habló así a todos los israelitas, el pueblo lloró a gritos. Por eso llamaron a aquel lugar Boquín,[a] y allí ofrecieron sacrificios al Señor.

Desobediencia y derrota(A)

Cuando Josué despidió al pueblo, los israelitas se fueron a tomar posesión de la tierra, cada uno a su propio territorio. Durante toda la vida de Josué, el pueblo sirvió al Señor. Así sucedió también durante el tiempo en que estuvieron al frente de Israel los jefes que habían compartido el liderazgo con Josué y que habían visto todas las grandes obras que el Señor había hecho por Israel.

Josué, hijo de Nun, siervo del Señor, murió a la edad de ciento diez años y lo sepultaron en Timnat Jeres,[b] tierra de su heredad, en la región montañosa de Efraín, al norte del monte de Gaas.

10 También murió toda aquella generación y surgió otra que no conocía al Señor ni sabía lo que él había hecho por Israel. 11 Esos israelitas hicieron lo malo ante los ojos del Señor y adoraron a los ídolos de Baal. 12 Abandonaron al Señor, Dios de sus antepasados, que los había sacado de Egipto, siguieron a otros dioses —dioses de los pueblos que los rodeaban— y los adoraron, provocando así la ira del Señor. 13 Abandonaron al Señor y adoraron a Baal y a las imágenes de Astarté. 14 Entonces el Señor se enfureció contra los israelitas y los entregó en manos de invasores que los saquearon. Los dejó en manos de los enemigos que tenían a su alrededor, a los que ya no pudieron hacerles frente. 15 Cada vez que los israelitas salían a combatir, la mano del Señor estaba en contra de ellos para su mal, tal como el Señor se lo había dicho y jurado. Así llegaron a verse muy angustiados.

16 Entonces el Señor hizo surgir líderes[c] que los libraron del poder de esos invasores. 17 Sin embargo, tampoco escucharon a esos líderes, sino que se prostituyeron al entregarse a otros dioses y adorarlos. Muy pronto se apartaron del camino que habían seguido sus antepasados, el camino de la obediencia a los mandamientos del Señor. 18 Cada vez que el Señor levantaba entre ellos un líder, el Señor estaba con él. Mientras ese líder vivía, los libraba del poder de sus enemigos, porque el Señor se compadecía de ellos al oírlos gemir por causa de quienes los oprimían y afligían. 19 Pero cuando el líder moría, ellos volvían a corromperse aún más que sus antepasados, pues se iban tras otros dioses, a los que servían y adoraban. De tal forma se negaban a abandonar sus malvadas costumbres y su obstinada conducta.

20 Por eso el Señor se enfureció contra Israel y dijo: «Puesto que esta nación ha violado el pacto que yo establecí con sus antepasados y no me ha obedecido, 21 tampoco yo echaré de su presencia a ninguna de las naciones que Josué dejó al morir. 22 Las usaré para poner a prueba a Israel y ver si guarda mi camino y anda por él, como lo hicieron sus antepasados». 23 Por eso el Señor dejó en paz a esas naciones; no las echó enseguida ni las entregó en manos de Josué.

Footnotes

  1. 2:5 En hebreo, Boquín significa los que lloran.
  2. 2:9 Timnat Jeres. También conocida como Timnat Sera (véanse Jos 19:50 y 24:30).
  3. 2:16 líderes. Tradicionalmente jueces; así en el resto de este libro.

El ángel del Señor en Boquín

El ángel del Señor fue de Gilgal a Boquín, y les dijo a los israelitas:

«Yo los liberé de Egipto y los llevé a la tierra que prometí dar a sus antepasados, cuando les dije: “Nunca anularé mi pacto con ustedes, mientras no hagan pacto con los que habitan en esta tierra, gente que tiene altares que ustedes deben destruir.”(A) Pero ustedes no me hicieron caso. ¿Por qué no lo han hecho? Por lo tanto, escúchenme bien: No voy a expulsar de estas tierras a sus habitantes, sino que ellos serán para ustedes como azotes en los costados, y sus dioses los confundirán.»

Cuando el ángel del Señor dijo esto a los israelitas, ellos se echaron a llorar con fuerte voz. Por eso, a ese lugar lo llamaron Boquín,[a] y allí ofrecieron sacrificios al Señor.

Muerte de Josué(B)

Josué despidió al pueblo de Israel, y cada uno fue y tomó posesión de su heredad. Y mientras vivió Josué, y los ancianos que le sobrevivieron y que habían visto las obras del Señor en favor de Israel, todo el pueblo sirvió al Señor. Y Josué hijo de Nun, siervo del Señor, murió a la edad de ciento diez años. Lo sepultaron en Timnat Seraj,(C) que era su heredad, en el monte de Efraín, al norte del monte de Gaas. 10 Y murió también toda esa generación, y se reunió con sus antepasados. Después de ellos vino otra generación que no conocía al Señor, ni sabía lo que el Señor había hecho por Israel.

Apostasía de Israel y surgimiento de los jueces

11 Los israelitas hicieron lo malo a los ojos del Señor, y adoraron a los baales. 12 Abandonaron al Señor, el Dios que sacó a sus antepasados de la tierra de Egipto, y empezaron a adorar a los dioses de los pueblos que vivían a su alrededor, con lo que provocaron el enojo del Señor. 13 Se apartaron del Señor, para adorar a Baal y a Astarot. 14 Por eso el Señor se enojó contra el pueblo de Israel y los entregó en manos de ladrones, que lo despojaron de todo; los dejó a merced de los enemigos que lo rodeaban, a los cuales ya no pudo vencer. 15 A dondequiera que iban, la mano del Señor estaba en contra de ellos para su mal, y tal como se lo había jurado, se vieron en gran aflicción.

16 Entonces el Señor suscitó caudillos para que los libraran de aquellos que los despojaban. 17 Pero ellos tampoco escuchaban a sus caudillos, sino que se fueron tras dioses ajenos, a los cuales adoraron, y pronto se apartaron del camino que habían seguido sus antepasados, pues sus antepasados habían obedecido los mandamientos del Señor, pero ellos no lo hicieron así. 18 Cuando el Señor suscitaba algún caudillo, también lo apoyaba y, mientras ese caudillo vivía, los libraba del poder de sus enemigos, pues el Señor se conmovía al escuchar los gemidos de su pueblo oprimido y afligido. 19 Pero al morir aquel caudillo, el pueblo volvía a corromperse aún más que sus antepasados, y seguía a los dioses ajenos para servirles y adorarlos; y no se arrepentían de sus obras, ni de su obstinada conducta. 20 Por eso la ira del Señor se encendió contra Israel, y dijo:

«Como este pueblo ha roto el pacto que establecí con sus antepasados, y no me obedece, 21 tampoco yo volveré a expulsar delante de ellos a ninguna de las naciones que Josué dejó al morir.»

22 Ésta era una prueba para Israel, para ver si se esforzaban en volver al camino del Señor, como sus antepasados. 23 Por esta razón, el Señor no expulsó a aquellas naciones, ni se las entregó a Josué, sino que las dejó entre ellos.

Footnotes

  1. Jueces 2:5 Es decir, los que lloran.

El ángel del Señor en Boquim

Y el ángel del Señor(A) subió de Gilgal a Boquim(B) y dijo: Yo os saqué de Egipto(C) y os conduje a la tierra que había prometido a vuestros padres y dije: «Jamás quebrantaré mi pacto con vosotros(D), y en cuanto a vosotros, no haréis pacto con los habitantes de esta tierra(E); sus altares derribaréis(F)». Pero vosotros no me habéis obedecido[a]; ¿qué es esto que habéis hecho? Por lo cual también dije: «No los echaré de delante de vosotros, sino que serán como espinas en vuestro costado[b](G), y sus dioses serán lazo para vosotros». Y sucedió que cuando el ángel del Señor habló estas palabras a todos los hijos de Israel, el pueblo alzó su voz y lloró. Y llamaron a aquel lugar Boquim[c]; y allí ofrecieron sacrificio al Señor.

Muerte de Josué

(H)Después que Josué despidió al pueblo, los hijos de Israel fueron cada uno a su heredad para tomar posesión de la tierra. Y el pueblo sirvió al Señor todos los días de Josué, y todos los días de los ancianos que sobrevivieron a[d] Josué, los cuales habían sido testigos de[e] la gran obra que el Señor había hecho por Israel. Josué, hijo de Nun, siervo del Señor, murió a la edad de ciento diez años. Y lo sepultaron en el territorio de su heredad, en Timnat-sera[f], en la región montañosa de Efraín(I), al norte del monte Gaas. 10 También toda aquella generación fue reunida a sus padres; y se levantó otra generación después de ellos que no conocía al Señor(J), ni la obra que Él había hecho por Israel.

Apostasía de Israel

11 Entonces los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos del Señor(K) y sirvieron[g] a los baales(L), 12 y abandonaron al Señor(M), el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y siguieron a otros dioses de entre los dioses de los pueblos que estaban a su derredor; se postraron ante ellos y provocaron a ira al Señor. 13 Y dejaron al Señor y sirvieron a Baal y a Astarot(N). 14 Y se encendió la ira del Señor contra Israel(O), y los entregó en manos de salteadores que los saquearon; y los vendió en mano de sus enemigos(P) de alrededor, y ya no pudieron hacer frente a sus enemigos. 15 Por dondequiera que iban, la mano del Señor estaba contra ellos para mal, tal como el Señor había dicho y como el Señor les había jurado, y se angustiaron en gran manera(Q). 16 Entonces el Señor levantó jueces que[h] los libraron de la mano de los que los saqueaban(R). 17 Con todo no escucharon a sus jueces, porque se prostituyeron siguiendo a[i] otros dioses, y se postraron ante ellos. Se apartaron pronto del camino en que sus padres habían andado en obediencia a los mandamientos del Señor(S); no hicieron como sus padres. 18 Cuando el Señor les levantaba jueces, el Señor estaba con el juez y los libraba de mano de sus enemigos todos los días del juez(T); porque el Señor se compadecía por sus gemidos a causa de los que los oprimían y afligían(U). 19 Pero acontecía que al morir el juez, ellos volvían atrás y se corrompían aún más que sus padres, siguiendo a otros dioses, sirviéndoles e inclinándose ante ellos; no dejaban sus costumbres ni su camino obstinado. 20 Y se encendió la ira del Señor contra Israel(V), y dijo: Por cuanto esta nación ha quebrantado el[j] pacto que ordené a sus padres, y no ha escuchado mi voz, 21 tampoco yo volveré a expulsar[k] de delante de ellos a ninguna de las naciones(W) que Josué dejó cuando murió, 22 para probar por medio de ellas a Israel, a ver si guardan o no el camino del Señor(X), y andan en él como lo hicieron[l] sus padres. 23 Así pues, el Señor permitió que aquellas naciones se quedaran allí, sin expulsarlas[m] enseguida, y no las entregó en manos de Josué.

Footnotes

  1. Jueces 2:2 Lit., no habéis escuchado mi voz
  2. Jueces 2:3 Algunas versiones antiguas dicen: os serán opresores
  3. Jueces 2:5 I.e., llorones
  4. Jueces 2:7 Lit., prolongaron días después de
  5. Jueces 2:7 O, habían visto
  6. Jueces 2:9 Heb., Timna-heres
  7. Jueces 2:11 O, adoraron
  8. Jueces 2:16 Lit., y
  9. Jueces 2:17 O, tras
  10. Jueces 2:20 Lit., mi
  11. Jueces 2:21 Lit., desposeer
  12. Jueces 2:22 Lit., guardaron
  13. Jueces 2:23 Lit., desposeerlas