Add parallel Print Page Options

Pero fui yo el que enseñó a caminar a Efraín tomándolo por sus brazos. Sin embargo, no reconocieron que yo los sanaba. Con cuerdas humanas los atraje, con vínculos de amor. Fui para ellos como los que ponen un bebé contra sus mejillas y me inclinaba hacia ellos para alimentarlos.

“No volverá a la tierra de Egipto sino que el asirio será su rey; porque no quisieron volver a mí.

Read full chapter