¹⁹ Por lo tanto, fue a predicarles a los espíritus encarcelados, ²⁰ esos que desobedecieron a Dios hace mucho tiempo, cuando Dios esperaba con paciencia mientras Noé construía su barco. Solo ocho personas se salvaron de morir ahogadas en ese terrible diluvio.^{[a] 21} El agua del diluvio simboliza el bautismo que ahora los salva a ustedes—no por quitarles la suciedad del cuerpo, sino porque responden a Dios con^[b] una conciencia limpia—y es eficaz por la resurrección de Jesucristo.