Add parallel Print Page Options

¶ Por lo cual, no pudiendo esperar más, acordamos quedarnos solos en Atenas,

y enviamos a Timoteo, nuestro hermano, y ministro de Dios, y colaborador nuestro en el Evangelio del Cristo, a confirmaros y exhortaros en vuestra fe,

para que nadie se mueva en estas tribulaciones; porque vosotros sabéis que nosotros somos puestos para esto.

Read full chapter

Por lo cual, no pudiendo soportarlo más, acordamos quedarnos solos en Atenas,(A) y enviamos a Timoteo nuestro hermano, servidor de Dios y colaborador nuestro en el evangelio de Cristo, para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe, a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos.

Read full chapter