Add parallel Print Page Options

Les ruego que cuiden el rebaño[a] de Dios que ha sido puesto bajo su responsabilidad, y no lo hagan por obligación, sino de buena voluntad, como Dios quiere. Háganlo con entusiasmo y no por ganar dinero. No sean crueles con los que están a su cargo. Más bien, sean un buen ejemplo para ellos. Así, cuando venga nuestro gran Pastor, recibirán una corona gloriosa que nunca perderá su valor.

Read full chapter

Footnotes

  1. 5:2 rebaño El pueblo de Dios.