2 Samuel 14:24-26

La Biblia de las Américas

²⁴ Pero el rey dijo: Que vuelva a su casa y no vea mi rostro. Y Absalón^(A) volvió a su casa, y no vio el rostro del rey.

²⁵ En todo Israel no había nadie tan bien parecido ni tan celebrado como Absalón; desde la planta de su pie hasta su coronilla no había defecto en él^(B). ²⁶ Cuando se cortaba el cabello^(C) (y era al final de cada año que se lo cortaba, pues le pesaba mucho y por eso se lo cortaba), el cabello pesaba doscientos siclos^[a] según el peso real.