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1-2 Estimado pueblo santo de Dios que es fiel a Jesucristo y vive en la ciudad de Colosas.

Un cordial saludo de Pablo, apóstol de Jesucristo por voluntad de Dios, y de Timoteo, nuestro hermano en Cristo.

Que la paz y las bendiciones de nuestro Padre Dios estén con ustedes.

Siempre que oramos damos gracias por ustedes a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, porque nos hemos enterado de la fe que tienen en Jesucristo y del amor que muestran por todo el pueblo santo de Dios. Su fe y amor están basados en la esperanza de recibir lo que Dios les tiene guardado en el cielo. Ustedes conocieron esa esperanza a través del mensaje verdadero, o sea, las buenas noticias de salvación que llegó hasta ustedes. Ese mensaje se está anunciando por todo el mundo y está dando una buena cosecha en todas partes. Lo mismo está sucediendo entre ustedes. El mensaje está creciendo entre todos desde el primer día en que oyeron las buenas noticias de Dios y entendieron la verdad sobre el generoso amor que él tiene. Eso les enseñó nuestro buen amigo y compañero Epafras, quien es fiel servidor de Cristo para ayudarnos.[a] Él nos contó del amor que ustedes tienen gracias al Espíritu Santo.

Por lo tanto, desde que supimos todo eso no hemos dejado de orar por ustedes. Pedimos a Dios

que los llene de conocimiento para entender su voluntad, y que les dé toda clase de sabiduría y entendimiento espiritual 10 para que así vivan de una manera que dé honor al Señor y para que le agraden en todo. Que puedan dar una cosecha de toda clase de buenas obras y que crezcan en el conocimiento de Dios. 11 Que les fortalezca el poder glorioso de Dios para que puedan resistir todo con paciencia.

Con alegría 12 darán gracias al Padre por considerarnos dignos de compartir la herencia que tiene preparada para todos los que pertenecen al pueblo de Dios y viven en la luz. 13 Dios nos rescató del poder de la oscuridad y nos hizo entrar al reino de su Hijo amado, 14 quien pagó el precio de nuestra libertad y así tenemos el perdón de nuestros pecados.

Cuando miramos a Cristo vemos a Dios

15 Nadie puede ver a Dios,
    pero Cristo es Dios en forma visible.
Él existe desde antes de la creación
    y es supremo Señor[b] de toda ella.
16 Con su poder creó todo lo que hay en el cielo y en la tierra,
    lo que se ve y lo que no se ve,
ya sean ellos seres espirituales, poderes, autoridades o gobernantes.
    Todo ha sido creado por él y para él.
17 Cristo existió antes que todas las cosas,
    y todo el universo sigue su curso gracias a él.
18 Cristo es la cabeza de la iglesia,
    que es su cuerpo.
Él dio comienzo a todo
    y fue el primero en resucitar de la muerte.
    Entonces él es el más importante en todo sentido.
19 A Dios le agradó que todo lo que él es
    habitara plenamente en Cristo.
20 Y con gusto decidió reconciliar consigo todas las cosas,
    tanto las que están en el cielo,
    como las que están en la tierra.
Dios hizo las paces con nosotros
    a través de la sangre que Cristo derramó en la cruz.

21 Antes, ustedes estaban alejados de Dios y su manera de pensar los hacía enemigos de Dios porque practicaban la maldad. 22 Pero ahora Dios, por medio de la muerte física de Cristo, los ha convertido en sus amigos. Cristo murió para presentarlos santos ante Dios, es decir, sin ninguna mancha ni maldad que pueda ser juzgada por Dios. 23 Cristo hará esto si siguen creyendo en la buena noticia que escucharon. Tengan una buena base y manténganse firmes en su fe. No se alejen de la esperanza que les da la buena noticia, que se ha contado en todas partes del mundo y que como siervo yo, Pablo, ayudo a anunciar.

Lo que hace Pablo por la iglesia

24 Me alegro en medio de mis sufrimientos por ustedes, pues lo que sufro en mi propio cuerpo completa lo que falta de los sufrimientos de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia. 25 Dios, según su plan, me hizo un siervo de la iglesia, y mi trabajo es presentarles el mensaje de Dios en forma completa,[c] 26 que es el plan secreto que ha estado oculto para todos desde el comienzo del mundo. Pero ahora Dios lo ha dado a conocer a su pueblo santo 27 porque quiso que su pueblo entendiera esa grandiosa y maravillosa verdad para todas las naciones, que antes no les había mostrado. El plan secreto es Cristo que vive en ustedes, que les da la esperanza de disfrutar la gloria. 28 Nosotros damos a conocer a Cristo a todos, aconsejándoles y enseñándoles con toda la sabiduría que Dios nos da, pues queremos presentarlos a todos ante Dios espiritualmente maduros en Cristo. 29 A tal fin trabajo con mucho empeño gracias al poder de Cristo que actúa en mí y me fortalece.

Footnotes

  1. 1:7 para ayudarnos Muchos manuscritos tienen para ayuda de ustedes.
  2. 1:15 supremo Señor Textualmente primogénito.
  3. 1:25 presentarles […] completa Textualmente completar la palabra de Dios. Ver Ro 15:19.

Salutación

Pablo, apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo, a los santos y fieles hermanos en Cristo que están en Colosas: Gracia y paz sean a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.

Pablo pide que Dios les conceda sabiduría espiritual

Siempre orando por vosotros, damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, habiendo oído de vuestra fe en Cristo Jesús, y del amor que tenéis a todos los santos, a causa de la esperanza que os está guardada en los cielos, de la cual ya habéis oído por la palabra verdadera del evangelio, que ha llegado hasta vosotros, así como a todo el mundo, y lleva fruto y crece también en vosotros, desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad, como lo habéis aprendido de Epafras,(A) nuestro consiervo amado, que es un fiel ministro de Cristo para vosotros, quien también nos ha declarado vuestro amor en el Espíritu.

Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, 10 para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios; 11 fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad; 12 con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; 13 el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, 14 en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.(B)

Reconciliación por medio de la muerte de Cristo

15 Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. 16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. 17 Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten; 18 y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia,(C) él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia; 19 por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, 20 y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.(D)

21 Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado 22 en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él; 23 si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído, el cual se predica en toda la creación que está debajo del cielo; del cual yo Pablo fui hecho ministro.

Ministerio de Pablo a los gentiles

24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros, y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia; 25 de la cual fui hecho ministro, según la administración de Dios que me fue dada para con vosotros, para que anuncie cumplidamente la palabra de Dios, 26 el misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos, 27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria, 28 a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre; 29 para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mí.