Add parallel Print Page Options

11 Las palabras de los sabios son como aguijones, y el conjunto de las palabras de los maestros, impartidas por un solo guía, son como clavos bien hincados.

12 Hijo mío, además de lo antes dicho, toma en cuenta que nunca se acaba de escribir muchos libros, y que el cuerpo se cansa de tanto estudiar. 13 Todo este discurso termina en lo siguiente: Teme a Dios, y cumple sus mandamientos. Eso es el todo del hombre.

Read full chapter