Cristo y la iglesia, un modelo para el hogar

22 (A)Las mujeres estén sometidas a sus propios maridos(B) como al Señor(C). 23 Porque el marido es cabeza de la mujer(D), así como Cristo es cabeza de la iglesia(E), siendo Él mismo el Salvador del cuerpo(F). 24 Pero así como la iglesia está sujeta a Cristo, también las mujeres deben estarlo a sus maridos en todo. 25 Maridos, amad a vuestras mujeres(G), así como Cristo amó a la iglesia y se dio a sí mismo por ella(H), 26 para santificarla(I), habiéndola purificado(J) por el lavamiento del agua(K) con la palabra(L), 27 a fin de presentársela a sí mismo, una[a] iglesia en toda su gloria[b], sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada(M). 28 Así también deben amar los maridos a sus mujeres, como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama(N). 29 Porque nadie aborreció jamás su propio cuerpo[c], sino que lo sustenta y lo cuida, así como también Cristo a la iglesia; 30 porque somos miembros de su cuerpo[d](O). 31 Por esto el hombre dejará a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne(P). 32 Grande es este misterio, pero hablo con referencia a Cristo y a la iglesia. 33 En todo caso, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo(Q), y que la mujer respete[e] a su marido(R).

Exhortación a los hijos y a los padres

Hijos, obedeced a vuestros padres en el Señor(S), porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre(T) (que es el primer mandamiento con promesa), para que te vaya bien, y para que tengas larga vida sobre la tierra. Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos(U), sino criadlos en la disciplina e instrucción del Señor(V).

Relaciones entre amos y siervos

Siervos[f], obedeced a vuestros[g] amos en la tierra[h](W), con temor y temblor(X), con[i] la sinceridad de vuestro corazón, como a Cristo(Y); no para ser vistos[j](Z), como los que quieren agradar a los hombres(AA), sino como siervos[k] de Cristo(AB), haciendo de corazón[l] la voluntad de Dios. Servid[m] de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres(AC), sabiendo que cualquier cosa buena que cada uno haga, esto recibirá del Señor(AD), sea siervo[n] o sea libre(AE). Y vosotros, amos, haced lo mismo con[o] ellos, y dejad las amenazas(AF), sabiendo que el Señor[p] de ellos y de vosotros está en los cielos(AG), y que para Él no hay acepción de personas(AH).

Footnotes

  1. Efesios 5:27 Lit., la
  2. Efesios 5:27 Lit., gloriosa
  3. Efesios 5:29 Lit., propia carne
  4. Efesios 5:30 Algunos mss. agregan: de su carne y de sus huesos
  5. Efesios 5:33 Lit., tema
  6. Efesios 6:5 O, Esclavos
  7. Efesios 6:5 Lit., los
  8. Efesios 6:5 Lit., según la carne
  9. Efesios 6:5 Lit., en
  10. Efesios 6:6 Lit., no según el servir al ojo
  11. Efesios 6:6 O, esclavos
  12. Efesios 6:6 Lit., alma
  13. Efesios 6:7 Lit., Sirviendo
  14. Efesios 6:8 O, esclavo
  15. Efesios 6:9 Lit., a
  16. Efesios 6:9 O, Amo

22 Las casadas estén sujetas a sus propios maridos,(A) como al Señor; 23 porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador. 24 Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo. 25 Maridos, amad a vuestras mujeres,(B) así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, 26 para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, 27 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. 28 Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. 29 Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia, 30 porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos. 31 Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne.(C) 32 Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia. 33 Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.

Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.(D) Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.(E) Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos,(F) sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.

Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como a Cristo; no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios; sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres, sabiendo que el bien que cada uno hiciere, ese recibirá del Señor, sea siervo o sea libre.(G) Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos,(H) y que para él no hay acepción de personas.(I)

Relaciones sociales del cristiano

18 (A)Mujeres, estad sujetas a vuestros maridos(B), como conviene en el Señor. 19 Maridos, amad a vuestras[a] mujeres(C) y no seáis ásperos[b] con ellas. 20 Hijos, sed obedientes a vuestros padres en todo, porque esto es agradable al[c] Señor(D). 21 Padres, no exasperéis[d] a vuestros hijos(E), para que no se desalienten. 22 Siervos[e], obedeced en todo a vuestros[f] amos en la tierra[g](F), no para ser vistos[h], como los que quieren agradar a los hombres, sino con sinceridad de corazón, temiendo al Señor(G). 23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres(H), 24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa(I) de la herencia(J). Es a Cristo el Señor a quien servís(K). 25 Porque el que procede con injusticia sufrirá las consecuencias del mal que ha cometido(L), y eso, sin acepción de personas(M).

Amos, tratad con justicia y equidad a vuestros siervos[i], sabiendo que vosotros también tenéis un Señor[j] en el cielo(N).

Footnotes

  1. Colosenses 3:19 Lit., las
  2. Colosenses 3:19 O, amargos
  3. Colosenses 3:20 Lit., en el
  4. Colosenses 3:21 Algunos mss. antiguos dicen: no provoquéis a ira
  5. Colosenses 3:22 O, Esclavos
  6. Colosenses 3:22 Lit., los
  7. Colosenses 3:22 Lit., según la carne
  8. Colosenses 3:22 Lit., no en el servir al ojo
  9. Colosenses 4:1 O, esclavos
  10. Colosenses 4:1 O, Amo

Deberes sociales de la nueva vida

18 Casadas, estad sujetas a vuestros maridos,(A) como conviene en el Señor. 19 Maridos, amad a vuestras mujeres,(B) y no seáis ásperos con ellas. 20 Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.(C) 21 Padres, no exasperéis a vuestros hijos,(D) para que no se desalienten. 22 Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios. 23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; 24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís. 25 Mas el que hace injusticia, recibirá la injusticia que hiciere,(E) porque no hay acepción de personas.(F)

Amos, haced lo que es justo y recto con vuestros siervos, sabiendo que también vosotros tenéis un Amo en los cielos.(G)