Deberes de levitas y sacerdotes

44 El hombre me hizo regresar por la puerta exterior del Templo, la que daba al oriente, pero estaba cerrada. Allí el Señor me dijo: «Esta puerta quedará cerrada. No se abrirá y nadie deberá entrar por ella. Deberá quedar cerrada porque por ella ha entrado el Señor, Dios de Israel. Tan solo el príncipe podrá sentarse junto a la puerta para comer en presencia del Señor. Deberá entrar por el vestíbulo de la puerta y salir por el mismo lugar».

Los levitas

Después el hombre me llevó por el camino de la puerta del norte, que está frente al Templo. Al ver que la gloria del Señor llenaba el Templo, me postré rostro en tierra.

Entonces el Señor me dijo: «Hijo de hombre, presta mucha atención. Abre bien los ojos y escucha atentamente todo lo que voy a decirte sobre los estatutos y las leyes concernientes al Templo. Fíjate bien en quiénes pueden entrar al santuario y quiénes no. Adviértele a este pueblo rebelde de Israel que así dice el Señor y Dios: “Pueblo de Israel, ¡basta ya de tus abominaciones! Ustedes dejaron entrar en mi santuario a extranjeros, incircuncisos de corazón y de cuerpo, para que profanaran mi Templo. Mientras tanto, ustedes me ofrecían alimentos, grasa y sangre, violando así mi pacto con todas sus abominaciones. En lugar de cumplir con su deber respecto de mis cosas santas, pusieron a extranjeros a cargo de mi santuario. Así dice el Señor y Dios: ¡No entrará en mi santuario ningún extranjero incircunciso de corazón y de cuerpo; ni siquiera los extranjeros que habitan entre los israelitas!

10 »”Tendrán que pagar por su iniquidad los levitas que se alejaron de mí cuando Israel se descarriaba para ir tras sus ídolos. 11 Podrán ministrar en mi santuario como custodios de las puertas y en algunos otros menesteres del Templo. Ellos serán los que maten los animales para el holocausto y para el sacrificio que presenta el pueblo; deberán estar dispuestos a servirlo. 12 Pero por haber servido al pueblo de Israel delante de sus ídolos y, además, por haber sido piedra de tropiezo, tendrán que pagar por su iniquidad. He jurado solemnemente con la mano en alto que deben recibir la consecuencia de sus pecados. Yo, el Señor y Dios, lo afirmo. 13 No podrán acercarse a mí para servir como sacerdotes ni se acercarán a mis objetos sagrados; menos aún, a los objetos santísimos. Tendrán que cargar con la vergüenza de las abominaciones que han cometido. 14 Sin embargo, los pondré a cargo de la custodia del Templo y de todo el servicio y el trabajo que se deba cumplir en él.

15 »”En cambio, se acercarán para ministrar delante de mí los sacerdotes levitas descendientes de Sadoc, que estuvieron al servicio de mi santuario cuando los israelitas se descarriaban de mí; y se presentarán ante mí para ofrecerme la grasa y la sangre. Yo, el Señor y Dios, lo afirmo. 16 Solo ellos entrarán en mi santuario y podrán acercarse a mi mesa para ministrar delante de mí y encargarse de sus deberes.

17 »”Y, cuando entren por la puerta del atrio interior, se pondrán vestiduras de tela de lino. Cuando estén ministrando a las puertas del atrio interior o en el Templo, no llevarán ropa de lana. 18 Llevarán turbantes de tela de lino sobre la cabeza, y alrededor de la cintura usarán ropa interior de tela de lino. No se pondrán nada en la cintura que los haga transpirar. 19 Y cuando salgan al atrio exterior donde está el pueblo, deberán quitarse la ropa con la que hayan ministrado y dejarla en las salas sagradas. Luego se cambiarán de ropa, a fin de no consagrar al pueblo por medio de sus vestiduras.

20 »”No se afeitarán la cabeza, pero tampoco se dejarán largo el cabello, sino que se lo recortarán prolijamente.

21 »”Ningún sacerdote deberá beber vino cuando entre en el atrio interior.

22 »”No deberá casarse con una viuda o una divorciada, sino solo con una israelita que aún sea virgen o con la viuda de un sacerdote.

23 »”Deberán enseñarle a mi pueblo a distinguir entre lo sagrado y lo profano, y mostrarle cómo diferenciar entre lo puro y lo impuro.

24 »”En cualquier pleito, los sacerdotes servirán como jueces y juzgarán según mis leyes. En todas mis fiestas observarán mis ordenanzas y mis estatutos; deberán santificar mis sábados.

25 »”El sacerdote no deberá acercarse a un cadáver para no contaminarse. Pero si el cadáver es de su propio padre o madre, hijo o hija, hermano o hermana soltera, entonces sí podrá contaminarse. 26 Si queda contaminado, deberá purificarse y luego esperar siete días. 27 El día en que vuelva a entrar en el atrio interior del santuario para ministrar, deberá ofrecer su sacrificio por el pecado, afirma el Señor y Dios.

28 »”Los sacerdotes no tendrán ninguna heredad, porque su heredad soy yo. Ustedes no les darán ninguna propiedad en Israel. Su propiedad soy yo. 29 Ellos se alimentarán de la ofrenda de cereal, la ofrenda por el pecado y la ofrenda por la culpa. Además, todo lo que los israelitas consagren al Señor será para ellos. 30 También recibirán lo mejor de todas las primicias y de todas las ofrendas que ustedes presenten. Darán a los sacerdotes, para su pan, las primicias de la molienda. Así mi bendición reposará sobre los hogares de ustedes. 31 Los sacerdotes no comerán ningún animal, sea ave o bestia, que sea encontrado muerto o despedazado por una fiera.

División de la tierra

45 »”Cuando por sorteo se repartan la tierra como herencia, deberán reservar una porción de terreno, la cual será consagrada al Señor. Esta porción santa será de veinticinco mil codos de largo por veinte mil codos[a] de ancho. Todo este territorio será santo. De allí se adjudicará para el santuario un terreno cuadrado de quinientos codos por lado. Además, alrededor de ese terreno se reservará un espacio libre de cincuenta codos de ancho. En esa sección reservada apartarás una parcela de veinticinco mil codos de largo por diez mil codos de ancho, donde estará el santuario, el Lugar Santísimo. Esta será la porción santa de tierra para los sacerdotes que ministran en el santuario y que se acercan para ministrar delante del Señor. Allí construirán sus casas y el santuario del Señor. Además, a los levitas que sirven en el Templo se les adjudicará un espacio de veinticinco mil codos de largo por diez mil codos de ancho, para que tengan ciudades donde vivir.[b]

»”Y como territorio para la ciudad se asignará, junto a la sección reservada para el santuario, un espacio de cinco mil codos de ancho por veinticinco mil codos de largo. Este terreno pertenecerá a todo el pueblo de Israel.

»”Al príncipe se le asignará una porción de tierra a ambos lados de la sección reservada para el santuario y de la sección reservada para la ciudad. Por el lado oeste se extenderá hacia el oeste y hacia el este por el lado oriental. Su longitud de este a oeste será igual a la de los terrenos asignados a una de las tribus. Esta tierra será su posesión en Israel; así mis príncipes no volverán a oprimir a mi pueblo, sino que dejarán que las tribus de Israel ocupen la tierra.

»”Así dice el Señor y Dios: ¡Basta ya, príncipes de Israel! ¡Abandonen la violencia y la explotación! ¡Practiquen el derecho y la justicia! ¡Dejen de extorsionar a mi pueblo!, afirma el Señor y Dios. 10 ¡Usen balanzas justas; el peso y la medida del efa[c] y el bato[d] deberán ser exactos! 11 El efa y el bato serán de una misma medida. Cada uno será equivalente a una décima parte de un jómer,[e] el cual servirá de patrón para ambas medidas. 12 En cuanto a las medidas de peso: un siclo[f] será igual a veinte guerás[g] y una mina[h] será igual a sesenta siclos.

13 »”Esta es la ofrenda especial que presentarán: por cada jómer de trigo, la sexta parte de un efa;[i] por cada jómer de cebada, la sexta parte de un efa.[j] 14 La medida para el aceite es la siguiente: por cada coro de aceite, la décima parte de un bato.[k] El coro equivale tanto a diez batos como a un jómer, pues diez batos equivalen a un jómer.

15 »”En cuanto a las ovejas, se tomará una de cada doscientas de los rebaños que pastan en las mejores praderas de Israel. Estas se usarán para las ofrendas de cereales, el holocausto y el sacrificio de comunión, a fin de obtener perdón por los pecados de ellos, afirma el Señor. 16 Todo el pueblo de la tierra estará obligado a contribuir para esta ofrenda especial del príncipe de Israel. 17 Será deber del príncipe proveer los holocaustos, las ofrendas de cereales y las ofrendas líquidas en las fiestas, las lunas nuevas, los sábados y en todas las fiestas señaladas en el pueblo de Israel. Deberá también proveer las ofrendas por el pecado, las ofrendas de cereales, los holocaustos y las ofrendas de comunión para obtener perdón por los pecados de Israel.

18 »”Así dice el Señor y Dios: El día primero del mes primero tomarás un novillo sin defecto y lo ofrecerás como sacrificio para purificar de pecado el santuario. 19 El sacerdote tomará de la sangre de la ofrenda por el pecado y la pondrá sobre los postes de la puerta del Templo, en las cuatro esquinas del zócalo superior del altar y en los postes de la puerta del atrio interior. 20 Lo mismo harás el día siete del mes con todo el que haya pecado sin intención o por ignorancia. Así el Templo quedará purificado.

21 »”El día catorce del mes primero deberás celebrar la fiesta de la Pascua. Durante siete días comerás pan sin levadura. 22 Ese día el príncipe deberá ofrecer un novillo como sacrificio por su pecado y el de todo el pueblo. 23 Y cada día, durante los siete días de la fiesta, el príncipe deberá ofrecer en holocausto al Señor siete novillos y siete carneros sin defecto. Además, cada día ofrecerá un macho cabrío como sacrificio por el pecado. 24 También ofrecerá, como ofrenda de grano, un efa de cereal por cada novillo, un efa por cada carnero y un hin[l] de aceite por cada efa.

25 »”Durante los siete días de la fiesta, que comienza el día quince del mes séptimo, el príncipe deberá proveer lo mismo para el sacrificio por el pecado, el holocausto y las ofrendas de cereales y de aceite.

46 »”Así dice el Señor y Dios: La puerta oriental del atrio interior permanecerá cerrada durante los días laborables, pero se abrirá los sábados y los días de luna nueva. El príncipe entrará por el vestíbulo de la puerta y se detendrá junto a uno de los postes de la puerta; entonces los sacerdotes ofrecerán sus holocaustos y sus sacrificios de comunión. Y él se postrará en adoración en el umbral de la puerta y luego saldrá. Sin embargo, la puerta no se cerrará hasta el atardecer.

»”Los sábados y los días de luna nueva el pueblo de la tierra se postrará en adoración en presencia del Señor, frente a la misma puerta. El holocausto que el príncipe ofrecerá al Señor el día sábado será de seis corderos y un carnero, todos ellos sin defecto alguno. La ofrenda de cereales será de un efa[m] por carnero, y por los corderos, lo que él quiera dar; por cada efa deberá ofrecer un hin[n] de aceite. En el día de luna nueva deberá ofrecer un novillo, seis corderos y un carnero, todos ellos sin defecto alguno. Por el novillo ofrecerá una ofrenda de cereales de un efa, y lo mismo por el carnero. Por los corderos, la ofrenda de cereales será tanto como quiera dar y por cada efa deberá ofrecer un hin de aceite.

»”Cuando el príncipe entre, lo hará por el vestíbulo de la puerta y saldrá por el mismo lugar. Pero, cuando el pueblo se presente delante del Señor durante las fiestas señaladas, el que entre para adorar por la puerta del norte saldrá por la puerta del sur; así mismo, el que entre por la puerta del sur saldrá por la puerta del norte. Nadie saldrá por la misma puerta por la que entró, sino que siempre saldrá por la de enfrente. 10 Al entrar y al salir, el príncipe deberá estar entre ellos. 11 En los festivales y en las fiestas señaladas, la ofrenda de cereales será de un efa por cada novillo y lo mismo por cada carnero. Por los corderos será según lo que él quiera dar y por cada efa deberá ofrecerse un hin de aceite.

12 »”Y cuando el príncipe presente una ofrenda voluntaria al Señor, ya sea un holocausto o un sacrificio de comunión, se le abrirá la puerta oriental y ofrecerá su holocausto o su sacrificio de comunión de la misma manera que lo hace el día sábado. Luego saldrá y tras él cerrarán la puerta.

13 »”Todas las mañanas ofrecerás en holocausto al Señor un cordero de un año sin defecto. 14 De la misma manera, ofrecerás cada mañana una ofrenda de cereales. Será de una sexta parte de un efa,[o] con una tercera parte de un hin[p] de aceite para humedecer la harina refinada. Esta será una ofrenda al Señor, que se presentará siempre por estatuto perpetuo. 15 Por lo tanto, cada mañana se ofrecerán, como holocausto perpetuo, el cordero, la ofrenda de cereales y la ofrenda de aceite.

16 »”Así dice el Señor y Dios: Si el príncipe regala a alguno de sus hijos parte de su herencia, ese regalo les pertenecerá a sus descendientes, pues es su herencia. 17 Pero si regala parte de su herencia a alguno de sus siervos, esta solo pertenecerá al siervo hasta el año de la liberación, después de lo cual el siervo se la devolverá al príncipe. La herencia del príncipe es patrimonio de sus descendientes. 18 El príncipe no se apoderará de la herencia del pueblo ni lo privará de lo que le pertenece. A sus hijos dará solamente lo que sea parte de su propiedad personal. Así en mi pueblo nadie quedará despojado de su propiedad”».

19 Luego el hombre me llevó a la entrada que estaba al lado de la puerta, a las habitaciones que dan al norte y que estaban consagradas para los sacerdotes. Desde allí me mostró un espacio en el fondo, al lado oeste. 20 Y me dijo: «Este es el lugar donde los sacerdotes hervirán la carne de los animales ofrecidos en sacrificio por la culpa o por el pecado. También aquí se cocerán las ofrendas de cereales. Esto es para que no tengan que sacarlas al atrio exterior, pues el pueblo podría entrar en contacto con los objetos sagrados».

21 Entonces me llevó al atrio exterior y me hizo pasar por las cuatro esquinas del atrio. Vi que en cada ángulo había un pequeño atrio. 22 En las cuatro esquinas del atrio había atrios cercados,[q] todos del mismo tamaño, de cuarenta codos de largo por treinta de ancho.[r] 23 Alrededor de los cuatro atrios había un muro y en todo el derredor de la parte baja del muro había unos fogones. 24 Entonces me dijo: «Estas son las cocinas donde los servidores del Templo hervirán los animales para los sacrificios del pueblo».

El río del Templo

47 El hombre me trajo de vuelta a la entrada del Templo y vi que brotaba agua por debajo del umbral, en dirección al oriente, que es hacia donde da la fachada del Templo. El agua corría por la parte baja del lado derecho del Templo, al sur del altar. Luego el hombre me sacó por la puerta del norte y me hizo dar la vuelta por fuera, hasta la puerta exterior que mira hacia el oriente; y vi que las aguas fluían del lado sur.

El hombre salió hacia el oriente con una cuerda en la mano, midió mil codos y me hizo cruzar el agua, la cual me llegaba a los tobillos. Luego midió otros mil codos y me hizo cruzar el agua, que ahora me llegaba a las rodillas. Midió otros mil codos y me hizo cruzar el agua, que esta vez me llegaba a la cintura. Midió otros mil codos, pero la corriente se había convertido ya en un río que yo no podía cruzar. Creció tanto el torrente que solo se podía cruzar a nado. Entonces me preguntó: «¿Lo has visto, hijo de hombre?».

Enseguida me hizo volver a la orilla del río y, al llegar, vi una gran cantidad de árboles a cada lado del torrente. Allí me dijo: «Estas aguas fluyen hacia la región oriental, descienden hasta el Arabá y van a dar al mar Muerto. Cuando desembocan en ese mar, las aguas se vuelven dulces. Por donde corra este río, todo ser viviente que en él se mueva vivirá. Habrá peces en abundancia porque el agua de este río transformará el agua salada en agua dulce; así donde el río fluye todo vivirá. 10 Junto al río se detendrán los pescadores, desde Engadi hasta Eneglayin, porque allí habrá lugar para secar sus redes. Los peces allí serán tan variados y numerosos como en el mar Mediterráneo.[s] 11 Pero sus pantanos y ciénagas no tendrán agua dulce, sino que quedarán como salinas. 12 Junto a las orillas del río crecerá toda clase de árboles frutales; sus hojas no se marchitarán, y siempre tendrán frutos. Cada mes darán frutos nuevos, porque el agua que los riega sale del santuario. Sus frutos servirán de alimento y sus hojas serán medicinales».

Los límites del país

13 Así dice el Señor y Dios: «Estos son los límites del país que se repartirá como herencia a las doce tribus de Israel, tomando en cuenta que a José le tocará una doble porción. 14 Deben dividirla por partes iguales entre ustedes. Porque con la mano en alto juré solemnemente a sus antepasados darles este país como herencia.

15 »Los límites del país serán:

»Por el lado norte, comenzando desde el mar Mediterráneo y pasando por la ciudad de Hetlón hasta la entrada de Zedad: 16 Jamat, Berotá, Sibrayin —que está entre el territorio de Damasco y el de Jamat— y Jazar Haticón, que limita con Jaurán. 17 Así el límite norte se extenderá desde el mar Mediterráneo hasta Jazar Enán. Al norte quedarán los territorios de Jamat y Jaurán.

18 Por el oriente, la frontera entre la tierra de Israel y Jaurán, Damasco y Galaad será el río Jordán hasta la ciudad de Tamar, que está junto al mar Muerto; esta será la frontera oriental.

19 Por el sur, la frontera irá desde Tamar hasta el oasis de Meribá Cades, en dirección del torrente de Egipto hasta el mar Mediterráneo. Esta será la frontera sur.

20 Por el occidente, la frontera será el mar Mediterráneo, desde el límite sur hasta la costa que está a la altura de Lebó Jamat.[t] Esta será la frontera occidental.

21 »Ustedes deberán repartirse esta tierra entre las doce tribus de Israel. 22 La sortearán como herencia entre ustedes y entre los extranjeros que habiten entre ustedes y hayan tenido hijos, a los cuales deberán considerar israelitas por nacimiento. Por tanto, estos extranjeros recibirán una herencia con ustedes entre las tribus de Israel. 23 Y en la tribu donde esté residiendo el extranjero, allí le darán su herencia», afirma el Señor y Dios.

Reparto de la tierra

48 «Estos son los nombres de las tribus:

»En la frontera norte, que va de este a oeste y desde el Mediterráneo, pasando por Hetlón, hasta Lebó Jamat y Jazar Enán, que es la parte al sur de Damasco y Jamat, la tribu de Dan tendrá su porción de territorio.

Debajo de Dan, de este a oeste, está la porción de territorio de Aser.

Debajo de Aser, de este a oeste, está la porción de territorio de Neftalí.

Debajo de Neftalí, de este a oeste, está la porción de territorio de Manasés.

Debajo de Manasés, de este a oeste, está la porción de territorio de Efraín.

Debajo de Efraín, de este a oeste, está la porción de territorio de Rubén.

Debajo de Rubén, de este a oeste, está la porción de territorio de Judá.

»Debajo de Judá, de este a oeste, está la porción de territorio que reservarás. Será de veinticinco mil codos[u] de ancho y de este a oeste su longitud será la misma que la de los otros territorios. En medio de esta porción estará el santuario.

»La parcela que ustedes deben reservar para el Señor tendrá veinticinco mil codos de largo por diez mil codos[v] de ancho. 10 Dentro de esta parcela sagrada, a los sacerdotes corresponderá una sección exclusiva que medirá veinticinco mil codos por el norte y diez mil codos por el oeste, diez mil codos por el este y veinticinco mil codos por el sur. En medio de ella se levantará el santuario del Señor. 11 Esta sección estará destinada a los sacerdotes consagrados, descendientes de Sadoc, que cuando se descarrió el pueblo de Israel se encargaron de mi servicio y no se descarriaron, como los levitas. 12 Y será para ellos una ofrenda especial de la tierra, un lugar santísimo, que limita con el territorio de los levitas.

13 »También los levitas tendrán una parcela de veinticinco mil codos de largo por diez mil codos de ancho, a lo largo del territorio de los sacerdotes. En total, la parcela reservada tendrá veinticinco mil codos de largo por diez mil codos de ancho. 14 No se podrá vender ni cambiar nada de ella. Esta es la mejor tierra y no debe pasar a otras manos, pues está consagrada al Señor.

15 »La sección restante de cinco mil codos[w] de ancho por veinticinco mil codos de largo es terreno profano. Se dedicará al uso común de la ciudad, para la construcción de viviendas y para pastizales. La ciudad quedará en el centro. 16 Medirá cuatro mil quinientos codos[x] de largo por el lado norte y lo mismo por sus lados sur, este y oeste. 17 Los pastizales de la ciudad medirán doscientos cincuenta codos[y] de ancho alrededor de toda la ciudad. 18 A los costados de la ciudad quedará una sección, junto a la parcela consagrada, que tendrá diez mil codos de largo por la parte este, y otros tantos por el oeste. Todo lo que allí se produzca servirá de alimento para los trabajadores de la ciudad. 19 Ellos la cultivarán sin importar a qué tribu pertenezcan. 20 Toda la parcela consagrada, incluso lo que pertenece a la ciudad, formará un cuadrado de veinticinco mil codos por lado.

21 »El terreno que quede a ambos lados de la parcela consagrada y de la que pertenece a la ciudad será para el príncipe. A él le tocará una parcela de veinticinco mil codos por el lado este, hasta la frontera oriental, y veinticinco mil codos por el oeste, hasta la frontera occidental. Todo esto quedará paralelo a las otras secciones. En el centro estarán la parcela consagrada y el santuario del Templo. 22 Así mismo, la propiedad de los levitas y la de la ciudad se ubicarán entre las fronteras de Judá y Benjamín, en medio de la parcela que corresponde al príncipe.

23 »En cuanto a las demás tribus:

»A Benjamín le tocará una sección de este a oeste.

24 Debajo de Benjamín, a Simeón le tocará una sección de este a oeste.

25 Debajo de Simeón, a Isacar le tocará una sección de este a oeste.

26 Debajo de Isacar, a Zabulón le tocará una sección de este a oeste.

27 Debajo de Zabulón, a Gad le tocará una sección de este a oeste.

28 Debajo de Gad, por el lado sur, la frontera irá desde Tamar hasta el oasis de Meribá Cades y el torrente de Egipto, y hasta el mar Mediterráneo.

29 »Este es el territorio que ustedes repartirán por sorteo entre las tribus de Israel y que será su herencia. Así quedará distribuido el territorio», afirma el Señor y Dios.

Las puertas de Jerusalén

30 «Estas son las salidas de la ciudad:

»Por el norte, la ciudad medirá cuatro mil quinientos codos de largo. 31 Las puertas de la ciudad tendrán los nombres de las tribus de Israel. Al norte habrá tres puertas: la de Rubén, la de Judá y la de Leví.

32 Por el este, la ciudad medirá cuatro mil quinientos codos de largo y tendrá tres puertas: la de José, la de Benjamín y la de Dan.

33 Por el sur, la ciudad medirá cuatro mil quinientos codos de largo y tendrá tres puertas: la de Simeón, la de Isacar y la de Zabulón.

34 Por el oeste, la ciudad medirá cuatro mil quinientos codos de largo y tendrá tres puertas: la de Gad, la de Aser y la de Neftalí.

35 »La distancia alrededor de la ciudad será de dieciocho mil codos.[z]

»Y desde aquel día el nombre de la ciudad será: “El Señor está allí”».

Footnotes

  1. 45:1 veinte mil codos (LXX); diez mil codos (TM).
  2. 45:5 ciudades donde vivir (LXX); veinte habitaciones (TM).
  3. 45:10 Es decir, aprox. 16 kg.
  4. 45:10 Es decir, aprox. 22 l.
  5. 45:11 Un jómer era una medida para áridos con un equivalente aproximado de 220 l o 160 kg.
  6. 45:12 Es decir, aprox. 11.5 g.
  7. 45:12 Un guerá era equivalente aprox. a 0.57 g.
  8. 45:12 Es decir, 60 siclos; la mina común contenía 50 siclos. Sesenta siclos era aprox. 690 g.
  9. 45:13 Es decir, aprox. 2.7 kg de trigo.
  10. 45:13 Es decir, aprox. 2.3 kg de cebada.
  11. 45:14 Es decir, aprox. 2.2 l.
  12. 45:24 Es decir, aprox. 3.8 l.
  13. 46:5 Es decir, aprox. 16 kg; también en vv. 7 y 11.
  14. 46:5 Es decir, aprox. 3.8 l; también en vv. 7 y 11.
  15. 46:14 Es decir, aprox. 2.7 kg.
  16. 46:14 Es decir, aprox. 1.3 l.
  17. 46:22 cercados. Palabra de difícil traducción.
  18. 46:22 Es decir, aprox. 21 m de largo por 16 m de ancho.
  19. 47:10 mar Mediterráneo. Lit. mar grande; también en vv. 15, 19 y 20.
  20. 47:20 Lebó Jamat. Alt. la entrada de Jamat; también en 48:1.
  21. 48:8 Es decir, aprox. 13 km; también en vv. 9, 10, 13, 15, 20 y 21.
  22. 48:9 Es decir, aprox. 5.3 km de ancho; también en vv. 10, 13 y 18.
  23. 48:15 Es decir, aprox. 2.7 km.
  24. 48:16 Es decir, aprox. 2.4 km; también en vv. 30, 32, 33 y 34.
  25. 48:17 Es decir, aprox. 135 m.
  26. 48:35 Es decir, aprox. 9.5 km.

44 Me hizo volver hacia la puerta exterior del santuario, la cual mira hacia el oriente; y estaba cerrada. Y me dijo Jehová: Esta puerta estará cerrada; no se abrirá, ni entrará por ella hombre, porque Jehová Dios de Israel entró por ella; estará, por tanto, cerrada. En cuanto al príncipe, por ser el príncipe, él se sentará allí para comer pan delante de Jehová; por el vestíbulo de la puerta entrará, y por ese mismo camino saldrá.

Y me llevó hacia la puerta del norte por delante de la casa; y miré, y he aquí la gloria de Jehová había llenado la casa de Jehová; y me postré sobre mi rostro. Y me dijo Jehová: Hijo de hombre, pon atención, y mira con tus ojos, y oye con tus oídos todo lo que yo hablo contigo sobre todas las ordenanzas de la casa de Jehová, y todas sus leyes; y pon atención a las entradas de la casa, y a todas las salidas del santuario. Y dirás a los rebeldes, a la casa de Israel: Así ha dicho Jehová el Señor: Basta ya de todas vuestras abominaciones, oh casa de Israel; de traer extranjeros, incircuncisos de corazón e incircuncisos de carne, para estar en mi santuario y para contaminar mi casa; de ofrecer mi pan, la grosura y la sangre, y de invalidar mi pacto con todas vuestras abominaciones. Pues no habéis guardado lo establecido acerca de mis cosas santas, sino que habéis puesto extranjeros como guardas de las ordenanzas en mi santuario.

Así ha dicho Jehová el Señor: Ningún hijo de extranjero, incircunciso de corazón e incircunciso de carne, entrará en mi santuario, de todos los hijos de extranjeros que están entre los hijos de Israel. 10 Y los levitas que se apartaron de mí cuando Israel se alejó de mí, yéndose tras sus ídolos, llevarán su iniquidad. 11 Y servirán en mi santuario como porteros a las puertas de la casa y sirvientes en la casa; ellos matarán el holocausto y la víctima para el pueblo, y estarán ante él para servirle. 12 Por cuanto les sirvieron delante de sus ídolos, y fueron a la casa de Israel por tropezadero de maldad; por tanto, he alzado mi mano y jurado, dice Jehová el Señor, que ellos llevarán su iniquidad. 13 No se acercarán a mí para servirme como sacerdotes, ni se acercarán a ninguna de mis cosas santas, a mis cosas santísimas, sino que llevarán su vergüenza y las abominaciones que hicieron. 14 Les pondré, pues, por guardas encargados de la custodia de la casa, para todo el servicio de ella, y para todo lo que en ella haya de hacerse.

15 Mas los sacerdotes levitas hijos de Sadoc, que guardaron el ordenamiento del santuario cuando los hijos de Israel se apartaron de mí, ellos se acercarán para ministrar ante mí, y delante de mí estarán para ofrecerme la grosura y la sangre, dice Jehová el Señor. 16 Ellos entrarán en mi santuario, y se acercarán a mi mesa para servirme, y guardarán mis ordenanzas. 17 Y cuando entren por las puertas del atrio interior, se vestirán vestiduras de lino; no llevarán sobre ellos cosa de lana, cuando ministren en las puertas del atrio interior y dentro de la casa. 18 Turbantes de lino tendrán sobre sus cabezas, y calzoncillos de lino sobre sus lomos;(A) no se ceñirán cosa que los haga sudar. 19 Cuando salgan al atrio exterior, al atrio de afuera, al pueblo, se quitarán las vestiduras con que ministraron, y las dejarán en las cámaras del santuario,(B) y se vestirán de otros vestidos, para no santificar al pueblo con sus vestiduras. 20 Y no se raparán su cabeza, ni dejarán crecer su cabello,(C) sino que lo recortarán solamente. 21 Ninguno de los sacerdotes beberá vino cuando haya de entrar en el atrio interior.(D) 22 Ni viuda ni repudiada tomará por mujer, sino que tomará virgen del linaje de la casa de Israel, o viuda que fuere viuda de sacerdote.(E) 23 Y enseñarán a mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y lo profano, y les enseñarán a discernir entre lo limpio y lo no limpio.(F) 24 En los casos de pleito ellos estarán para juzgar; conforme a mis juicios juzgarán; y mis leyes y mis decretos guardarán en todas mis fiestas solemnes, y santificarán mis días de reposo.[a] 25 No se acercarán a hombre muerto para contaminarse;(G) pero por padre o madre, hijo o hija, hermano, o hermana que no haya tenido marido, sí podrán contaminarse. 26 Y después de su purificación, le contarán siete días. 27 Y el día que entre al santuario, al atrio interior, para ministrar en el santuario, ofrecerá su expiación, dice Jehová el Señor.

28 Y habrá para ellos heredad; yo seré su heredad,(H) pero no les daréis posesión en Israel; yo soy su posesión. 29 La ofrenda y la expiación y el sacrificio por el pecado comerán, y toda cosa consagrada en Israel será de ellos. 30 Y las primicias de todos los primeros frutos de todo, y toda ofrenda de todo lo que se presente de todas vuestras ofrendas, será de los sacerdotes; asimismo daréis al sacerdote las primicias de todas vuestras masas, para que repose la bendición en vuestras casas.(I) 31 Ninguna cosa mortecina ni desgarrada, así de aves como de animales, comerán los sacerdotes.(J)

45 Cuando repartáis por suertes la tierra en heredad, apartaréis una porción para Jehová, que le consagraréis en la tierra, de longitud de veinticinco mil cañas y diez mil de ancho; esto será santificado en todo su territorio alrededor. De esto será para el santuario quinientas cañas de longitud y quinientas de ancho, en cuadro alrededor; y cincuenta codos en derredor para sus ejidos. Y de esta medida medirás en longitud veinticinco mil cañas, y en ancho diez mil, en lo cual estará el santuario y el lugar santísimo. Lo consagrado de esta tierra será para los sacerdotes, ministros del santuario, que se acercan para ministrar a Jehová; y servirá de lugar para sus casas, y como recinto sagrado para el santuario. Asimismo veinticinco mil cañas de longitud y diez mil de ancho, lo cual será para los levitas ministros de la casa, como posesión para sí, con veinte cámaras.

Para propiedad de la ciudad señalaréis cinco mil de anchura y veinticinco mil de longitud, delante de lo que se apartó para el santuario; será para toda la casa de Israel.

Y la parte del príncipe estará junto a lo que se apartó para el santuario, de uno y otro lado, y junto a la posesión de la ciudad, delante de lo que se apartó para el santuario, y delante de la posesión de la ciudad, desde el extremo occidental hasta el extremo oriental, y la longitud será desde el límite occidental hasta el límite oriental. Esta tierra tendrá por posesión en Israel, y nunca más mis príncipes oprimirán a mi pueblo; y darán la tierra a la casa de Israel conforme a sus tribus.

Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Basta ya, oh príncipes de Israel! Dejad la violencia y la rapiña. Haced juicio y justicia; quitad vuestras imposiciones de sobre mi pueblo, dice Jehová el Señor.

10 Balanzas justas, efa justo, y bato justo tendréis.(K) 11 El efa y el bato serán de una misma medida: que el bato tenga la décima parte del homer, y la décima parte del homer el efa; la medida de ellos será según el homer. 12 Y el siclo será de veinte geras. Veinte siclos, veinticinco siclos, quince siclos, os serán una mina.

13 Esta será la ofrenda que ofreceréis: la sexta parte de un efa por cada homer del trigo, y la sexta parte de un efa por cada homer de la cebada. 14 La ordenanza para el aceite será que ofreceréis un bato de aceite, que es la décima parte de un coro; diez batos harán un homer; porque diez batos son un homer. 15 Y una cordera del rebaño de doscientas, de las engordadas de Israel, para sacrificio, y para holocausto y para ofrendas de paz, para expiación por ellos, dice Jehová el Señor. 16 Todo el pueblo de la tierra estará obligado a dar esta ofrenda para el príncipe de Israel. 17 Mas al príncipe corresponderá el dar el holocausto y el sacrificio y la libación en las fiestas solemnes, en las lunas nuevas, en los días de reposo[b] y en todas las fiestas de la casa de Israel; él dispondrá la expiación, la ofrenda, el holocausto y las ofrendas de paz, para hacer expiación por la casa de Israel.

18 Así ha dicho Jehová el Señor: El mes primero, el día primero del mes, tomarás de la vacada un becerro sin defecto, y purificarás el santuario. 19 Y el sacerdote tomará de la sangre de la expiación, y pondrá sobre los postes de la casa, y sobre los cuatro ángulos del descanso del altar, y sobre los postes de las puertas del atrio interior. 20 Así harás el séptimo día del mes para los que pecaron por error y por engaño, y harás expiación por la casa.

21 El mes primero, a los catorce días del mes, tendréis la pascua, fiesta de siete días; se comerá pan sin levadura.(L) 22 Aquel día el príncipe sacrificará por sí mismo y por todo el pueblo de la tierra, un becerro por el pecado. 23 Y en los siete días de la fiesta solemne ofrecerá holocausto a Jehová, siete becerros y siete carneros sin defecto, cada día de los siete días; y por el pecado un macho cabrío cada día. 24 Y con cada becerro ofrecerá ofrenda de un efa, y con cada carnero un efa; y por cada efa un hin de aceite. 25 En el mes séptimo, a los quince días del mes, en la fiesta, hará como en estos siete días(M) en cuanto a la expiación, en cuanto al holocausto, en cuanto al presente y en cuanto al aceite.

46 Así ha dicho Jehová el Señor: La puerta del atrio interior que mira al oriente estará cerrada los seis días de trabajo, y el día de reposo[c] se abrirá; se abrirá también el día de la luna nueva. Y el príncipe entrará por el camino del portal de la puerta exterior, y estará en pie junto al umbral de la puerta mientras los sacerdotes ofrezcan su holocausto y sus ofrendas de paz, y adorará junto a la entrada de la puerta; después saldrá; pero no se cerrará la puerta hasta la tarde. Asimismo adorará el pueblo de la tierra delante de Jehová, a la entrada de la puerta, en los días de reposo[d] y en las lunas nuevas. El holocausto que el príncipe ofrecerá a Jehová en el día de reposo[e] será seis corderos sin defecto, y un carnero sin tacha; y por ofrenda un efa con cada carnero; y con cada cordero una ofrenda conforme a sus posibilidades, y un hin de aceite con el efa. Mas el día de la luna nueva, un becerro sin tacha de la vacada, seis corderos, y un carnero; deberán ser sin defecto. Y hará ofrenda de un efa con el becerro, y un efa con cada carnero; pero con los corderos, conforme a sus posibilidades; y un hin de aceite por cada efa. Y cuando el príncipe entrare, entrará por el camino del portal de la puerta, y por el mismo camino saldrá.

Mas cuando el pueblo de la tierra entrare delante de Jehová en las fiestas, el que entrare por la puerta del norte saldrá por la puerta del sur, y el que entrare por la puerta del sur saldrá por la puerta del norte; no volverá por la puerta por donde entró, sino que saldrá por la de enfrente de ella. 10 Y el príncipe, cuando ellos entraren, entrará en medio de ellos; y cuando ellos salieren, él saldrá.

11 Y en las fiestas y en las asambleas solemnes será la ofrenda un efa con cada becerro, y un efa con cada carnero; y con los corderos, conforme a sus posibilidades; y un hin de aceite con cada efa. 12 Mas cuando el príncipe libremente hiciere holocausto u ofrendas de paz a Jehová, le abrirán la puerta que mira al oriente, y hará su holocausto y sus ofrendas de paz, como hace en el día de reposo;[f] después saldrá, y cerrarán la puerta después que saliere.

13 Y ofrecerás en sacrificio a Jehová cada día en holocausto un cordero de un año sin defecto; cada mañana lo sacrificarás. 14 Y con él harás todas las mañanas ofrenda de la sexta parte de un efa, y la tercera parte de un hin de aceite para mezclar con la flor de harina; ofrenda para Jehová continuamente, por estatuto perpetuo. 15 Ofrecerán, pues, el cordero y la ofrenda y el aceite, todas las mañanas en holocausto continuo.

16 Así ha dicho Jehová el Señor: Si el príncipe diere parte de su heredad a sus hijos, será de ellos; posesión de ellos será por herencia. 17 Mas si de su heredad diere parte a alguno de sus siervos, será de él hasta el año del jubileo,(N) y volverá al príncipe; mas su herencia será de sus hijos. 18 Y el príncipe no tomará nada de la herencia del pueblo, para no defraudarlos de su posesión; de lo que él posee dará herencia a sus hijos, a fin de que ninguno de mi pueblo sea echado de su posesión.

19 Me trajo después por la entrada que estaba hacia la puerta, a las cámaras santas de los sacerdotes, las cuales miraban al norte, y vi que había allí un lugar en el fondo del lado de occidente. 20 Y me dijo: Este es el lugar donde los sacerdotes cocerán la ofrenda por el pecado y la expiación; allí cocerán la ofrenda, para no sacarla al atrio exterior, santificando así al pueblo.

21 Y luego me sacó al atrio exterior, y me llevó por los cuatro rincones del atrio; y en cada rincón había un patio. 22 En los cuatro rincones del atrio había patios cercados, de cuarenta codos de longitud y treinta de ancho; una misma medida tenían los cuatro. 23 Y había una pared alrededor de ellos, alrededor de los cuatro, y abajo fogones alrededor de las paredes. 24 Y me dijo: Estas son las cocinas, donde los servidores de la casa cocerán la ofrenda del pueblo.

Las aguas salutíferas

47 Me hizo volver luego a la entrada de la casa; y he aquí aguas que salían de debajo del umbral de la casa(O) hacia el oriente; porque la fachada de la casa estaba al oriente, y las aguas descendían de debajo, hacia el lado derecho de la casa, al sur del altar. Y me sacó por el camino de la puerta del norte, y me hizo dar la vuelta por el camino exterior, fuera de la puerta, al camino de la que mira al oriente; y vi que las aguas salían del lado derecho.

Y salió el varón hacia el oriente, llevando un cordel en su mano; y midió mil codos, y me hizo pasar por las aguas hasta los tobillos. Midió otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta las rodillas. Midió luego otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta los lomos. Midió otros mil, y era ya un río que yo no podía pasar, porque las aguas habían crecido de manera que el río no se podía pasar sino a nado. Y me dijo: ¿Has visto, hijo de hombre?

Después me llevó, y me hizo volver por la ribera del río. Y volviendo yo, vi que en la ribera del río había muchísimos árboles a uno y otro lado. Y me dijo: Estas aguas salen a la región del oriente, y descenderán al Arabá, y entrarán en el mar; y entradas en el mar, recibirán sanidad las aguas. Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y recibirán sanidad; y vivirá todo lo que entrare en este río. 10 Y junto a él estarán los pescadores, y desde En-gadi hasta En-eglaim será su tendedero de redes; y por sus especies serán los peces tan numerosos como los peces del Mar Grande. 11 Sus pantanos y sus lagunas no se sanearán; quedarán para salinas. 12 Y junto al río, en la ribera, a uno y otro lado, crecerá toda clase de árboles frutales; sus hojas nunca caerán, ni faltará su fruto. A su tiempo madurará, porque sus aguas salen del santuario; y su fruto será para comer, y su hoja para medicina.

Límites y repartición de la tierra

13 Así ha dicho Jehová el Señor: Estos son los límites en que repartiréis la tierra por heredad entre las doce tribus de Israel. José tendrá dos partes. 14 Y la heredaréis así los unos como los otros; por ella alcé mi mano jurando que la había de dar a vuestros padres; por tanto, esta será la tierra de vuestra heredad.

15 Y este será el límite de la tierra hacia el lado del norte; desde el Mar Grande, camino de Hetlón viniendo a Zedad, 16 Hamat, Berota, Sibraim, que está entre el límite de Damasco y el límite de Hamat; Hazar-haticón, que es el límite de Haurán. 17 Y será el límite del norte desde el mar hasta Hazar-enán en el límite de Damasco al norte, y al límite de Hamat al lado del norte.

18 Del lado del oriente, en medio de Haurán y de Damasco, y de Galaad y de la tierra de Israel, al Jordán; esto mediréis de límite hasta el mar oriental.

19 Del lado meridional, hacia el sur, desde Tamar hasta las aguas de las rencillas; desde Cades y el arroyo hasta el Mar Grande; y esto será el lado meridional, al sur.

20 Del lado del occidente el Mar Grande será el límite hasta enfrente de la entrada de Hamat; este será el lado occidental.

21 Repartiréis, pues, esta tierra entre vosotros según las tribus de Israel. 22 Y echaréis sobre ella suertes por heredad para vosotros, y para los extranjeros que moran entre vosotros, que entre vosotros han engendrado hijos; y los tendréis como naturales entre los hijos de Israel; echarán suertes con vosotros para tener heredad entre las tribus de Israel. 23 En la tribu en que morare el extranjero, allí le daréis su heredad, ha dicho Jehová el Señor.

48 Estos son los nombres de las tribus: Desde el extremo norte por la vía de Hetlón viniendo a Hamat, Hazar-enán, en los confines de Damasco, al norte, hacia Hamat, tendrá Dan una parte, desde el lado oriental hasta el occidental. Junto a la frontera de Dan, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, tendrá Aser una parte. Junto al límite de Aser, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Neftalí, otra. Junto al límite de Neftalí, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Manasés, otra. Junto al límite de Manasés, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Efraín, otra. Junto al límite de Efraín, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Rubén, otra. Junto al límite de Rubén, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Judá, otra.

Junto al límite de Judá, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, estará la porción que reservaréis de veinticinco mil cañas de anchura, y de longitud como cualquiera de las otras partes, esto es, desde el lado del oriente hasta el lado del mar; y el santuario estará en medio de ella. La porción que reservaréis para Jehová tendrá de longitud veinticinco mil cañas, y diez mil de ancho. 10 La porción santa que pertenecerá a los sacerdotes será de veinticinco mil cañas al norte, y de diez mil de anchura al occidente, y de diez mil de ancho al oriente, y de veinticinco mil de longitud al sur; y el santuario de Jehová estará en medio de ella. 11 Los sacerdotes santificados de los hijos de Sadoc que me guardaron fidelidad, que no erraron cuando erraron los hijos de Israel, como erraron los levitas, 12 ellos tendrán como parte santísima la porción de la tierra reservada, junto al límite de la de los levitas. 13 Y la de los levitas, al lado de los límites de la de los sacerdotes, será de veinticinco mil cañas de longitud, y de diez mil de anchura; toda la longitud de veinticinco mil, y la anchura de diez mil. 14 No venderán nada de ello, ni lo permutarán, ni traspasarán las primicias de la tierra; porque es cosa consagrada a Jehová.

15 Y las cinco mil cañas de anchura que quedan de las veinticinco mil, serán profanas, para la ciudad, para habitación y para ejido; y la ciudad estará en medio. 16 Estas serán sus medidas: al lado del norte cuatro mil quinientas cañas, al lado del sur cuatro mil quinientas, al lado del oriente cuatro mil quinientas, y al lado del occidente cuatro mil quinientas. 17 Y el ejido de la ciudad será al norte de doscientas cincuenta cañas, al sur de doscientas cincuenta, al oriente de doscientas cincuenta, y de doscientas cincuenta al occidente. 18 Y lo que quedare de longitud delante de la porción santa, diez mil cañas al oriente y diez mil al occidente, que será lo que quedará de la porción santa, será para sembrar para los que sirven a la ciudad. 19 Y los que sirvan a la ciudad serán de todas las tribus de Israel. 20 Toda la porción reservada de veinticinco mil cañas por veinticinco mil en cuadro, reservaréis como porción para el santuario, y para la posesión de la ciudad.

21 Y del príncipe será lo que quedare a uno y otro lado de la porción santa y de la posesión de la ciudad, esto es, delante de las veinticinco mil cañas de la porción hasta el límite oriental, y al occidente delante de las veinticinco mil hasta el límite occidental, delante de las partes dichas será del príncipe; porción santa será, y el santuario de la casa estará en medio de ella. 22 De este modo la parte del príncipe será la comprendida desde la porción de los levitas y la porción de la ciudad, entre el límite de Judá y el límite de Benjamín.

23 En cuanto a las demás tribus, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, tendrá Benjamín una porción. 24 Junto al límite de Benjamín, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Simeón, otra. 25 Junto al límite de Simeón, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Isacar, otra. 26 Junto al límite de Isacar, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Zabulón, otra. 27 Junto al límite de Zabulón, desde el lado del oriente hasta el lado del mar, Gad, otra. 28 Junto al límite de Gad, al lado meridional al sur, será el límite desde Tamar hasta las aguas de las rencillas, y desde Cades y el arroyo hasta el Mar Grande. 29 Esta es la tierra que repartiréis por suertes en heredad a las tribus de Israel, y estas son sus porciones, ha dicho Jehová el Señor.

30 Y estas son las salidas de la ciudad:(P) al lado del norte, cuatro mil quinientas cañas por medida. 31 Y las puertas de la ciudad serán según los nombres de las tribus de Israel: tres puertas al norte: la puerta de Rubén, una; la puerta de Judá, otra; la puerta de Leví, otra. 32 Al lado oriental cuatro mil quinientas cañas, y tres puertas: la puerta de José, una; la puerta de Benjamín, otra; la puerta de Dan, otra. 33 Al lado del sur, cuatro mil quinientas cañas por medida, y tres puertas: la puerta de Simeón, una; la puerta de Isacar, otra; la puerta de Zabulón, otra. 34 Y al lado occidental cuatro mil quinientas cañas, y sus tres puertas: la puerta de Gad, una; la puerta de Aser, otra; la puerta de Neftalí, otra. 35 En derredor tendrá dieciocho mil cañas. Y el nombre de la ciudad desde aquel día será Jehová-sama.[g]

Footnotes

  1. Ezequiel 44:24 Aquí equivale a sábado.
  2. Ezequiel 45:17 Aquí equivale a sábado.
  3. Ezequiel 46:1 Aquí equivale a sábado.
  4. Ezequiel 46:3 Aquí equivale a sábado.
  5. Ezequiel 46:4 Aquí equivale a sábado.
  6. Ezequiel 46:12 Aquí equivale a sábado.
  7. Ezequiel 48:35 Esto es, Jehová allí.