Add parallel Print Page Options

Y ellos, escuchen o dejen de escuchar, porque son una casa rebelde(A), sabrán que un profeta ha estado entre ellos(B). Y tú, hijo de hombre, no temas, no temas ni a ellos ni a sus palabras aunque haya contigo cardos y espinas y te sientes en escorpiones(C); no temas sus palabras ni te atemorices ante ellos, porque son una casa rebelde(D). Les hablarás mis palabras, escuchen(E) o dejen de escuchar, porque son rebeldes(F).

Read full chapter

Acaso ellos escuchen; pero si no escucharen, porque son una casa rebelde, siempre conocerán que hubo profeta entre ellos. Y tú, hijo de hombre, no les temas, ni tengas miedo de sus palabras, aunque te hallas entre zarzas y espinos, y moras con escorpiones; no tengas miedo de sus palabras, ni temas delante de ellos, porque son casa rebelde. Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son muy rebeldes.

Read full chapter

Como esmeril[a], más duro que el pedernal, he hecho tu frente. No les temas ni te atemorices ante ellos, porque son casa rebelde.

Read full chapter

Footnotes

  1. Ezequiel 3:9 Lit., corindón

Como diamante, más fuerte que pedernal he hecho tu frente; no los temas, ni tengas miedo delante de ellos, porque son casa rebelde.

Read full chapter