³⁸ Entonces Pedro les dijo: «Arrepiéntanse^(A) y sean bautizados^(B) cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, y recibirán el don del Espíritu Santo.

²⁶ Pues todos ustedes son hijos de Dios^(A) mediante la fe en Cristo Jesús^(B). ²⁷ Porque todos los que fueron bautizados en Cristo^(C), de Cristo se han revestido^(D).

⁵ Jesús respondió: «En verdad te digo que el que no nace de agua y del Espíritu^(A) no puede entrar en el reino de Dios^(B).

²¹ Y correspondiendo a esto, el bautismo ahora los salva a ustedes^(A), no quitando la suciedad de la carne^(B), sino como una petición a Dios de una buena conciencia^(C), mediante la resurrección de Jesucristo^(D),

Derramamiento del espíritu de Dios

²⁹ No les ocultaré más Mi rostro, porque habré derramado Mi Espíritu sobre la casa de Israel», declara el Señor Dios^(A).

Lamento por el traspasado

¹⁰ »Y derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén, el Espíritu de gracia y de súplica^(A), y me mirarán a Mí, a quien han traspasado^(B). Y se lamentarán por Él, como quien se lamenta por un hijo único^(C), y llorarán por Él, como se llora por un primogénito.

³⁹ Pero Él decía esto del Espíritu^(A), que los que habían creído en Él habían de recibir; porque el Espíritu no había sido dado todavía^[a](B), pues Jesús aún no había sido glorificado^(C).