Add parallel Print Page Options

17 Y nunca más me acordaré
de sus pecados y maldades.»

18 Por lo tanto, si nuestros pecados han sido perdonados, ya no es necesario darle a Dios más ofrendas para que nos perdone.

Amistad con Dios

19 Hermanos, la sangre que Jesús derramó al morir nos permite ahora tener amistad con Dios, y entrar con toda libertad en el lugar más santo.

Read full chapter