²⁷ Pues los que habitan en Jerusalén y sus gobernantes^(A), sin reconocer a Jesús^(B) ni las palabras^[a] de los profetas^(C) que se leen todos los días de reposo^(D), cumplieron estas escrituras, cuando lo condenaron.

¹⁴ Pero el entendimiento de ellos se endureció^[a]. Porque hasta el día de hoy, en la lectura^(A) del antiguo pacto^[b](B) el mismo velo permanece sin alzarse, pues solo en Cristo es quitado^(C).

¹⁵ Y^[a] hasta el día de hoy, cada vez que se lee a Moisés, un velo está puesto sobre sus corazones.