Apostasía de Israel

2 Y vino a mí la palabra del Señor, diciendo: ² Ve y clama a los oídos de Jerusalén, diciendo: «Así dice el Señor^(A):

⁸ Entonces pasé junto a ti y te vi, y he aquí, tu tiempo era tiempo de amores^(A); extendí mi manto sobre ti^(B) y cubrí tu desnudez. Te hice juramento y entré en pacto contigo^(C)” —declara el Señor Dios— “y fuiste mía^(D). ⁹ Te lavé con agua, te limpié la sangre y te ungí con aceite^(E). ¹⁰ Te vestí con tela bordada y puse en tus pies sandalias de piel de marsopa; te envolví con lino fino y te cubrí con seda^(F). ¹¹ Te engalané con adornos, puse brazaletes en tus manos y un collar^(G) a tu cuello^(H). ¹² Puse un anillo en tu nariz^(I), pendientes en tus orejas y una hermosa corona en tu cabeza^(J). ¹³ Estabas adornada con oro y plata, y tu vestido era de lino fino, seda y tela bordada^(K). Comías flor de harina, miel y aceite; eras hermosa en extremo y llegaste a la realeza^(L). ¹⁴ Entonces tu fama se divulgó entre las naciones^(M) por tu hermosura, que era perfecta, gracias al esplendor que yo puse en ti” —declara el Señor Dios^(N).