37 —¡Así que eres rey! —le dijo Pilato.

Jesús contestó:

—Eres tú quien dice que soy rey. Yo para esto nací y para esto vine al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que está de parte de la verdad escucha mi voz.

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37 Le dijo entonces Pilato: «¿Así que tú eres rey?» Respondió Jesús: «Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz.»

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37 Pilato entonces le dijo: ¿Así que tú eres rey? Jesús respondió: Tú dices que soy rey(A). Para esto yo he nacido y para esto he venido al mundo, para dar testimonio de la verdad(B). Todo el que es de la verdad escucha mi voz(C).

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28 —Dichosos más bien —contestó Jesús— los que oyen la palabra de Dios y la obedecen.

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28 Jesús respondió: «Más bien, dichosos los que escuchan la palabra de Dios, y la obedecen.»

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28 Pero Él dijo: Al contrario, dichosos los que oyen la palabra de Dios y la guardan(A).

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42 »¡Ay de ustedes, fariseos!, que dan la décima parte de la menta, de la ruda y de toda clase de legumbres, pero descuidan la justicia y el amor de Dios. Debían haber practicado esto, sin dejar de hacer aquello.

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42 »¡Ay de ustedes, fariseos!, que dan el diezmo de la menta y de la ruda, y de toda clase de hortalizas,(A) pero pasan por alto la justicia y el amor de Dios. Esto es necesario que lo hagan, sin dejar de hacer aquello.

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42 Mas ¡ay de vosotros, fariseos!, porque pagáis el diezmo de(A) la menta y la ruda y toda clase de hortaliza, y sin embargo pasáis por alto la justicia y el amor de Dios; pero esto es lo que debíais haber practicado sin descuidar lo otro(B).

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Dios volvió a fijar un día, que es «hoy», cuando mucho después declaró por medio de David lo que ya se ha mencionado:

«Si ustedes oyen hoy su voz,
    no endurezcan sus corazones».[a]

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Footnotes

  1. 4:7 Sal 95:7,8.

vuelve a determinarse un día, «Hoy», al decir después de tanto tiempo, por medio de David:

«Si ustedes oyen hoy su voz,
no endurezcan su corazón».(A)

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Dios otra vez fija un día: Hoy. Diciendo por medio de[a] David después de mucho tiempo, como se ha dicho antes:

Si oís hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones(A).

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Footnotes

  1. Hebreos 4:7 O, en