²³ Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame^(A). ²⁴ Porque el que quiera salvar su vida^[a], la perderá, pero el que pierda su vida^[b] por causa de mí, ese la salvará^(B).

Cristo, poder de Dios

¹⁸ Porque la palabra de la cruz es necedad^(A) para los que se pierden^[a](B), pero para nosotros los salvos^[b] es poder de Dios^(C).

²⁴ mas para los llamados^(A), tanto judíos como griegos, Cristo es poder de Dios^(B) y sabiduría de Dios^(C).

²⁴ Pues los que son de Cristo Jesús^(A) han crucificado^(B) la carne con sus pasiones y deseos^(C).

¹⁴ Pero jamás^(A) acontezca que yo me gloríe, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo^(B), por el cual el mundo ha sido crucificado para mí^(C) y yo para el mundo^(D).

²⁹ Y con este fin también trabajo, esforzándome^(A) según su poder^[a] que obra poderosamente^[b] en mí^(B).