²⁶ Y si decimos: «De los hombres», tememos a la multitud; porque todos tienen a Juan por profeta^(A).

¹⁵ Pero otros decían: Es Elías. Y decían otros: Es un profeta, como uno de los profetas antiguos^(A).

¹⁶ El temor se apoderó de todos^(A), y glorificaban a Dios^(B), diciendo: Un gran profeta^(C) ha surgido entre nosotros, y: Dios ha visitado a su pueblo.

³⁹ Pero al ver esto el fariseo que le había invitado, dijo para sí^[a]: Si este fuera un profeta^[b](A), sabría quién y qué clase de mujer es la que le está tocando, que es una pecadora.

³³ Sin embargo, debo seguir mi camino, hoy, mañana y pasado mañana^(A); porque no puede ser que un profeta^(B) muera fuera de Jerusalén.

¹⁹ Entonces Él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos le dijeron: Las referentes a Jesús el Nazareno^(A), que fue un profeta^[a](B) poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo;

²¹ Y le preguntaron: ¿Entonces, qué? ¿Eres Elías^(A)? Y él dijo*: No soy. ¿Eres el profeta^(B)? Y respondió: No.

²⁵ Y le preguntaron, y le dijeron: Entonces, ¿por qué bautizas, si tú no eres el Cristo^[a], ni Elías, ni el profeta^(A)?

¹⁹ La mujer le dijo*: Señor, me parece que tú eres profeta^(A).

¹⁴ La gente entonces, al ver la señal^[a] que Jesús había hecho, decía: Verdaderamente este es el Profeta^(A) que había de venir^[b] al mundo.