Señales del fin del mundo(A)

24 Jesús salió del Templo y mientras caminaba se acercaron sus discípulos y le mostraron los edificios del Templo.

Pero él dijo:

—¿Ven todo esto? Les aseguro que no quedará piedra sobre piedra, pues todo será derribado.

Más tarde, estaba Jesús sentado en el monte de los Olivos cuando llegaron los discípulos y le preguntaron en privado:

—¿Cuándo sucederá eso y cuál será la señal de tu venida y del fin del mundo?[a]

—Tengan cuidado de que nadie los engañe —les advirtió Jesús—. Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y engañarán a muchos. Ustedes oirán de guerras y de rumores de guerras, pero procuren no alarmarse. Es necesario que eso suceda, pero no será todavía el fin. Se levantará nación contra nación y reino contra reino. Habrá hambre y terremotos en diferentes lugares. Todo esto será apenas el comienzo de los dolores.

»Entonces los entregarán para que los persigan y los maten, y los odiarán todas las naciones por causa de mi nombre. 10 En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe; unos a otros se traicionarán y se odiarán; 11 y surgirá un gran número de falsos profetas que engañarán a muchos. 12 Habrá tanta maldad que el amor de muchos se enfriará, 13 pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. 14 Y este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas las naciones; entonces vendrá el fin.

15 »Así que, cuando vean en el lugar santo “la abominación que causa destrucción”,[b] de la que habló el profeta Daniel (el que lee, que lo entienda), 16 entonces los que estén en Judea huyan a las montañas. 17 El que esté en la azotea no baje a llevarse nada de su casa. 18 Y el que esté en el campo no regrese para buscar su capa. 19 ¡Ay de las que estén embarazadas o amamantando en aquellos días! 20 Oren para que su huida no suceda en invierno ni en sábado. 21 Porque habrá una gran tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora ni la habrá jamás. 22 Si no se acortaran esos días, nadie sobreviviría, pero por causa de los elegidos se acortarán. 23 Entonces, si alguien les dice: “¡Miren, aquí está el Cristo!” o “¡Allí está!”, no lo crean. 24 Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas que harán grandes señales y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos. 25 Fíjense que se lo he dicho a ustedes de antemano.

26 »Por eso, si les dicen: “¡Miren que está en el desierto!”, no salgan; o: “¡Miren que está en la casa!”, no lo crean. 27 Porque así como el relámpago que sale del oriente se ve hasta en el occidente, así será la venida del Hijo del hombre. 28 Donde esté el cadáver, allí se reunirán los buitres.

29 »Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días,

»“se oscurecerá el sol
    y no brillará más la luna;
las estrellas caerán del cielo
    y los cuerpos celestes serán sacudidos”.[c]

30 »La señal del Hijo del hombre aparecerá en el cielo y se angustiarán todos los pueblos de la tierra. Verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria. 31 Y al sonido de la gran trompeta mandará a sus ángeles, y reunirán de los cuatro vientos a los elegidos, de un extremo al otro del cielo.

32 »Aprendan de la higuera esta lección: Tan pronto como se ponen tiernas sus ramas y brotan sus hojas, ustedes saben que el verano está cerca. 33 Igualmente, cuando vean todas estas cosas, sepan que el tiempo está cerca, a las puertas. 34 Les aseguro que no pasará esta generación hasta que todas estas cosas sucedan. 35 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán.

Se desconocen el día y la hora(B)(C)

36 »Pero en cuanto al día y la hora, nadie lo sabe, ni siquiera los ángeles del cielo, ni el Hijo,[d] sino solo el Padre. 37 La venida del Hijo del hombre será como en tiempos de Noé. 38 Porque en los días antes del diluvio comían, bebían, se casaban y daban en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca; 39 y no supieron nada de lo que sucedería hasta que llegó el diluvio y se los llevó a todos. Así será en la venida del Hijo del hombre. 40 Estarán dos hombres en el campo: uno será llevado y el otro será dejado. 41 Dos mujeres estarán moliendo: una será llevada y la otra será dejada.

42 »Por lo tanto, manténganse despiertos porque no saben qué día vendrá su Señor. 43 Pero entiendan esto: si un dueño de casa supiera a qué hora de la noche va a llegar el ladrón, se mantendría despierto para no dejarlo forzar la entrada. 44 Por eso también ustedes deben estar preparados, porque el Hijo del hombre vendrá cuando menos lo esperen.

45 »¿Quién es el siervo fiel y prudente a quien su señor ha dejado encargado de los sirvientes para darles la comida a su debido tiempo? 46 Dichoso el siervo cuando su señor, al regresar, lo encuentra cumpliendo con su deber. 47 Les aseguro que lo pondrá a cargo de todos sus bienes. 48 Pero ¿qué tal si ese siervo malo se pone a pensar: “Mi señor se está demorando” 49 y luego comienza a golpear a sus compañeros, a comer y beber con los borrachos? 50 El señor de ese siervo volverá el día en que el siervo menos lo espere y a la hora menos pensada. 51 Lo castigará severamente y le impondrá la condena que reciben los hipócritas.[e] Entonces habrá llanto y crujir de dientes.

Footnotes

  1. 24:3 el fin del mundo. Lit. la consumación del siglo.
  2. 24:15 Dn 9:27; 11:31; 12:11.
  3. 24:29 Is 13:10; 34:4.
  4. 24:36 Var. no incluye: ni el Hijo.
  5. 24:51 Lo castigará … hipócritas. Lit. lo cortará en dos y fijará su porción con los hipócritas.

Jesús predice la destrucción del templo(A)

24 Jesús salió del templo, y ya se iba cuando sus discípulos se acercaron para mostrarle los edificios del templo. Él les dijo: «¿Ven todo esto? De cierto les digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra. Todo será derribado.»

Señales antes del fin(B)

Mientras Jesús estaba sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron por separado, y le dijeron: «Dinos, ¿cuándo sucederá todo esto, y cuál será la señal de tu venida y del fin del mundo?» Jesús les respondió: «Cuídense de que nadie los engañe. Porque muchos vendrán en mi nombre, y dirán: “Yo soy el Cristo”, y engañarán a muchos. Ustedes oirán hablar de guerras y de rumores de guerras; pero no se angustien, porque es necesario que todo esto suceda; pero aún no será el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino, y habrá hambre y terremotos en distintos lugares. Todo esto será sólo el comienzo de los dolores.

»Entonces los entregarán a ustedes para ser torturados, y los matarán, y todos los odiarán por causa de mi nombre.(C) 10 En aquel tiempo muchos tropezarán, y unos a otros se traicionarán y odiarán. 11 Muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; 12 y tanto aumentará la maldad que el amor de muchos se enfriará. 13 Pero el que resista hasta el fin, será salvo.(D) 14 Y este evangelio del reino será predicado en todo el mundo para testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.

15 »Por tanto, cuando en el lugar santo vean la abominación desoladora, de la que habló el profeta Daniel(E) (el que lee, que entienda), 16 los que estén en Judea, huyan a los montes; 17 El que esté en la azotea, no baje para llevarse algo de su casa; 18 y el que esté en el campo, no vuelva atrás a tomar su capa.(F) 19 Pero ¡ay de las que en esos días estén embarazadas o amamantando! 20 Pídanle a Dios que no tengan que huir en invierno ni en día de reposo, 21 porque entonces habrá una gran tribulación,(G) como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá jamás. 22 Si aquellos días no fueran acortados, nadie sería salvo, pero serán acortados por causa de los escogidos. 23 Así que, si alguien les dice: “Miren, aquí está el Cristo”, o “Miren, allí está”, no lo crean. 24 Porque surgirán falsos cristos y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que, de ser posible, engañarán incluso a los elegidos. 25 Ya los he prevenido de todo. 26 Así que, si les dicen: “Miren, está en el desierto”, no vayan; o si les dicen: “Miren, está en los aposentos”, no lo crean. 27 Porque la venida del Hijo del Hombre será como el relámpago que sale del oriente y puede verse hasta el occidente.(H) 28 Porque los buitres se juntan donde está el cadáver.(I)

La venida del Hijo del Hombre(J)

29 »Inmediatamente después de la aflicción de aquellos días, el sol se oscurecerá y la luna dejará de brillar, las estrellas caerán del cielo,(K) y los poderes celestiales se estremecerán. 30 Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre, y todas las tribus de la tierra se lamentarán, y verán al Hijo del Hombre venir sobre las nubes del cielo,(L) con gran poder y gloria. 31 Y enviará a sus ángeles con gran voz de trompeta, y de los cuatro vientos, desde un extremo al otro del cielo, ellos juntarán a sus elegidos.

32 »De la higuera deben aprender esta parábola: Cuando sus ramas se ponen tiernas, y le brotan las hojas, ustedes saben que el verano ya está cerca. 33 De la misma manera, cuando ustedes vean todas estas cosas, sepan que la hora ya está cerca, y que está a la puerta. 34 De cierto les digo, que todo esto sucederá antes de que pase esta generación. 35 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.

36 »En cuanto al día y la hora, nadie lo sabe, ni siquiera los ángeles de los cielos. Sólo mi Padre lo sabe. 37 La venida del Hijo del Hombre será como en los días de Noé;(M) 38 pues así como en los días antes del diluvio la gente comía y bebía, y se casaba y daba en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, 39 y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos,(N) así será también la venida del Hijo del Hombre. 40 Entonces, estarán dos en el campo, y uno de ellos será tomado, y el otro será dejado. 41 Dos mujeres estarán en el molino, y una de ellas será tomada, y la otra será dejada. 42 Por tanto, estén atentos, porque no saben a qué hora va a venir su Señor. 43 Pero sepan esto, que si el dueño de la casa supiera a qué hora va a venir el ladrón, se quedaría despierto y no dejaría que robaran su casa. 44 Por tanto, también ustedes estén preparados, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que menos lo esperen.(O)

45 »¿Quién es el siervo fiel y prudente, al cual su señor deja encargado de los de su casa para que los alimente a su tiempo? 46 Bien por el siervo que, cuando su señor venga, lo encuentre haciendo así. 47 De cierto les digo que lo pondrá a cargo de todos sus bienes. 48 Pero si aquel siervo malo dice en su corazón: “Mi señor tarda en venir”, 49 y comienza a golpear a sus consiervos, y aun a comer y a beber con los borrachos, 50 el señor de aquel siervo vendrá en el día menos pensado, y a una hora que nadie sabe, 51 y lo castigará duramente, y le hará correr la misma suerte de los hipócritas. Allí habrá llanto y rechinar de dientes.

Profecía sobre la destrucción del templo

24 (A)Cuando salió Jesús del templo, y se iba, se le[a] acercaron sus discípulos para mostrarle los edificios del templo. Mas respondiendo Él, les dijo: ¿Veis[b] todo esto? En verdad os digo: no quedará aquí piedra sobre piedra que no sea derribada(B).

Señales antes del fin

Y estando Él sentado en el monte de los Olivos(C), se le acercaron los discípulos en privado, diciendo: Dinos, ¿cuándo sucederá[c] esto, y cuál será la señal de tu venida[d](D) y de la consumación[e] de este siglo? Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe(E). Porque muchos vendrán en mi nombre(F), diciendo: «Yo soy el Cristo[f]», y engañarán a muchos. Y habréis de oír de guerras y rumores de guerras(G). ¡Cuidado! No os alarméis, porque es necesario que todo esto suceda; pero todavía no es el fin. Porque se levantará nación contra nación(H), y reino contra reino, y en diferentes lugares habrá hambre y terremotos(I). Pero todo esto es solo el comienzo de dolores[g](J). Entonces os entregarán a tribulación(K), y os matarán, y seréis odiados de todas las naciones por causa de mi nombre(L). 10 Muchos tropezarán[h] entonces y caerán(M), y se traicionarán unos a otros, y unos a otros se odiarán. 11 Y se levantarán muchos falsos profetas(N), y a muchos engañarán. 12 Y debido al aumento de la iniquidad, el amor de muchos se enfriará. 13 Pero el que persevere hasta el fin, ese será salvo(O). 14 Y este evangelio del reino se predicará(P) en todo el mundo[i](Q) como testimonio a todas las naciones(R), y entonces vendrá el fin.

La abominación de la desolación

15 Por tanto, cuando veáis la abominación de la desolación(S), de que se habló por medio del profeta Daniel, colocada[j] en el lugar santo(T) (el que lea, que entienda(U)), 16 entonces los que estén en Judea, huyan a los montes; 17 el que esté en la azotea, no baje a sacar las cosas de su casa(V); 18 y el que esté en el campo, no vuelva atrás a tomar su capa. 19 Pero, ¡ay de las que estén encinta y de las que estén criando en aquellos días(W)! 20 Orad para que vuestra huida no suceda en invierno, ni en día de reposo, 21 porque habrá entonces una gran tribulación(X), tal como no ha acontecido desde el principio del mundo hasta ahora, ni acontecerá jamás. 22 Y si aquellos días no fueran acortados, nadie[k] se salvaría; pero por causa de los escogidos[l], aquellos días serán acortados(Y). 23 Entonces si alguno os dice: «Mirad, aquí está el Cristo[m]», o «Allí[n] está», no le creáis(Z). 24 Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas(AA), y mostrarán grandes señales[o] y prodigios(AB), para así engañar, de ser posible, aun a los escogidos[p](AC). 25 Ved que os lo he dicho de antemano. 26 Por tanto, si os dicen: «Mirad, Él está en el desierto», no vayáis; o «Mirad, Él está en las habitaciones interiores», no les creáis. 27 Porque así como el relámpago sale del oriente(AD) y resplandece hasta el occidente, así será la venida[q](AE) del Hijo del Hombre(AF). 28 Donde esté el cadáver, allí se juntarán los buitres[r](AG).

29 Pero inmediatamente después de la tribulación(AH) de esos días, el sol se oscurecerá(AI), la luna no dará su luz, las estrellas caerán(AJ) del cielo y las potencias de los cielos serán sacudidas. 30 Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del Hombre(AK); y entonces todas las tribus de la tierra harán duelo, y verán al Hijo del Hombre que viene sobre las nubes del cielo(AL) con poder y gran gloria. 31 Y Él enviará a sus ángeles(AM) con una gran trompeta(AN) y reunirán a sus escogidos[s](AO) de los cuatro vientos(AP), desde un extremo de los cielos hasta el otro[t](AQ).

Parábola de la higuera

32 Y de la higuera aprended la parábola: cuando su rama ya se pone tierna y echa las hojas, sabéis que el verano está cerca. 33 Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, sabed que Él está[u] cerca, a las puertas(AR). 34 En verdad os digo que no pasará esta generación(AS) hasta que todo esto suceda. 35 El cielo y la tierra pasarán(AT), mas mis palabras no pasarán. 36 Pero de aquel día y hora nadie sabe(AU), ni siquiera los ángeles del cielo, ni el Hijo, sino solo el Padre. 37 Porque como en los días de Noé(AV), así será la venida[v] del Hijo del Hombre(AW). 38 Pues así como en aquellos días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dándose en matrimonio(AX), hasta el día en que entró Noé en el arca(AY), 39 y no comprendieron[w] hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos; así será la venida[x] del Hijo del Hombre(AZ). 40 Entonces estarán dos en el campo; uno será[y] llevado y el otro será[z] dejado. 41 Dos mujeres(BA) estarán moliendo en el molino(BB); una será[aa] llevada y la otra será[ab] dejada. 42 Por tanto, velad[ac](BC), porque no sabéis en qué día vuestro Señor viene. 43 Pero comprended esto[ad]: si el dueño de la casa(BD) hubiera sabido a qué hora de la noche iba a venir el ladrón(BE), hubiera estado alerta y no hubiera permitido que entrara en[ae] su casa. 44 Por eso, también vosotros estad preparados(BF), porque a la hora que no pensáis vendrá el Hijo del Hombre(BG).

Parábola del siervo fiel y del infiel

45 ¿(BH)Quién es, pues, el siervo fiel(BI) y prudente(BJ) a quien su señor puso sobre(BK) los de su casa para que les diera la comida a su tiempo? 46 Dichoso[af] aquel siervo a quien, cuando su señor venga, lo encuentre haciendo así. 47 De cierto os digo que lo pondrá sobre todos sus bienes(BL). 48 Pero si aquel siervo es malo, y dice en su corazón: «Mi señor tardará[ag]»; 49 y empieza a golpear a sus consiervos, y come y bebe con los que se emborrachan, 50 vendrá el señor de aquel siervo el día que no lo espera, y a una hora que no sabe, 51 y lo azotará severamente[ah] y le asignará un lugar[ai] con los hipócritas; allí será el llanto y el crujir de dientes(BM).

Footnotes

  1. Mateo 24:1 Lit., y se
  2. Mateo 24:2 Lit., ¿No veis
  3. Mateo 24:3 Lit., será
  4. Mateo 24:3 O, presencia
  5. Mateo 24:3 O, del fin
  6. Mateo 24:5 I.e., el Mesías
  7. Mateo 24:8 Lit., dolores de parto
  8. Mateo 24:10 Lit., A muchos se les hará tropezar
  9. Mateo 24:14 Lit., toda la tierra habitada
  10. Mateo 24:15 O, de pie
  11. Mateo 24:22 Lit., ninguna carne
  12. Mateo 24:22 O, elegidos
  13. Mateo 24:23 I.e., el Mesías
  14. Mateo 24:23 Lit., Aquí
  15. Mateo 24:24 O, milagros
  16. Mateo 24:24 O, elegidos
  17. Mateo 24:27 O, presencia
  18. Mateo 24:28 O, las águilas
  19. Mateo 24:31 O, elegidos
  20. Mateo 24:31 Lit., el extremo de ellos
  21. Mateo 24:33 O, que está
  22. Mateo 24:37 O, presencia
  23. Mateo 24:39 Lit., no supieron
  24. Mateo 24:39 O, presencia
  25. Mateo 24:40 Lit., es
  26. Mateo 24:40 Lit., es
  27. Mateo 24:41 Lit., es
  28. Mateo 24:41 Lit., es
  29. Mateo 24:42 O, estad alerta
  30. Mateo 24:43 Lit., sabed aquello
  31. Mateo 24:43 Lit., horadara
  32. Mateo 24:46 O, bienaventurado
  33. Mateo 24:48 Lit., tarda
  34. Mateo 24:51 Lit., lo cortará en dos
  35. Mateo 24:51 Lit., su parte

Jesús predice la destrucción del templo

(Mr. 13.1-2; Lc. 21.5-6)

24 Cuando Jesús salió del templo y se iba, se acercaron sus discípulos para mostrarle los edificios del templo. Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto? De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea derribada.

Señales antes del fin

(Mr. 13.3-23; Lc. 21.7-24)

Y estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo? Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán. Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores.

Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre.(A) 10 Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán. 11 Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; 12 y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. 13 Mas el que persevere hasta el fin, este será salvo.(B) 14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

15 Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel(C) (el que lee, entienda), 16 entonces los que estén en Judea, huyan a los montes. 17 El que esté en la azotea, no descienda para tomar algo de su casa; 18 y el que esté en el campo, no vuelva atrás para tomar su capa.(D) 19 Mas ¡ay de las que estén encintas, y de las que críen en aquellos días! 20 Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno ni en día de reposo;[a] 21 porque habrá entonces gran tribulación,(E) cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. 22 Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados. 23 Entonces, si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo creáis. 24 Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. 25 Ya os lo he dicho antes. 26 Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis. 27 Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del Hombre.(F) 28 Porque dondequiera que estuviere el cuerpo muerto, allí se juntarán las águilas.(G)

La venida del Hijo del Hombre

(Mr. 13.24-37; Lc. 21.25-36; 17.25-36; 12.41-48)

29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo,(H) y las potencias de los cielos serán conmovidas. 30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo,(I) con poder y gran gloria. 31 Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

32 De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. 33 Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas. 34 De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca. 35 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.

36 Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino solo mi Padre. 37 Mas como en los días de Noé,(J) así será la venida del Hijo del Hombre. 38 Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, 39 y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos,(K) así será también la venida del Hijo del Hombre. 40 Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado. 41 Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será dejada. 42 Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. 43 Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa. 44 Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis.(L)

45 ¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su casa para que les dé el alimento a tiempo? 46 Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así. 47 De cierto os digo que sobre todos sus bienes le pondrá. 48 Pero si aquel siervo malo dijere en su corazón: Mi señor tarda en venir; 49 y comenzare a golpear a sus consiervos, y aun a comer y a beber con los borrachos, 50 vendrá el señor de aquel siervo en día que este no espera, y a la hora que no sabe, 51 y lo castigará duramente, y pondrá su parte con los hipócritas; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Footnotes

  1. Mateo 24:20 Aquí equivale a sábado.