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La recompensa por regresar al Señor

Volvamos al SEÑOR.
    Él nos destrozó, pero nos sanará.
    Nos hirió, pero nos vendará la herida.
En dos días él nos volverá a dar la vida,
    y al tercer día nos pondrá en pie.
    Entonces podremos vivir en su presencia.
Esforcémonos por conocer al SEÑOR,
    hasta estar tan seguros en él
    como de que el amanecer llegará.
Vendrá a nosotros como la lluvia,
    como el agua fresca que cae sobre la tierra.

«Efraín, ¿qué voy a hacer contigo?
    Judá, ¿qué voy a hacer contigo?
La fidelidad de ustedes
    es como las nubes de la tarde
o como el rocío de la mañana,
    desaparece rápidamente.
Así que les mandé a mis profetas hablando de muerte
    para partirles el corazón.
Todos pueden ver que soy justo al castigarlos;
    está tan claro como el día.
Lo que yo deseo de ti es fiel amor
    y no sacrificio.
Quiero que ustedes me conozcan,
    no que me hagan ofrendas.
Pero Efraín y Judá rompieron el pacto como hizo Adán.[a]
    Me traicionaron allí.
Galaad está lleno de delincuentes;
    es un lugar lleno de sangre.
Los sacerdotes, como si fueran ladrones,
    atacan a la gente en el camino a Siquén.
    Llevan a cabo sus planes malignos.
10 He visto algo horrible
    en la nación de Israel:
Efraín no es fiel a Dios.
    Israel está impuro.

11 »Judá, para ti también habrá tiempo de cosecha
    cuando libere a mi pueblo del cautiverio.

Footnotes

  1. 6:7 como hizo Adán Ver Gn 3.

Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará. Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos resucitará,(A) y viviremos delante de él. Y conoceremos, y proseguiremos en conocer a Jehová; como el alba está dispuesta su salida, y vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia tardía y temprana a la tierra.

¿Qué haré a ti, Efraín? ¿Qué haré a ti, oh Judá? La piedad vuestra es como nube de la mañana, y como el rocío de la madrugada, que se desvanece. Por esta causa los corté por medio de los profetas, con las palabras de mi boca los maté; y tus juicios serán como luz que sale. Porque misericordia quiero, y no sacrificio,(B) y conocimiento de Dios más que holocaustos.

Mas ellos, cual Adán, traspasaron el pacto; allí prevaricaron contra mí. Galaad, ciudad de hacedores de iniquidad, manchada de sangre. Y como ladrones que esperan a algún hombre, así una compañía de sacerdotes mata en el camino hacia Siquem; así cometieron abominación. 10 En la casa de Israel he visto inmundicia; allí fornicó Efraín, y se contaminó Israel.

11 Para ti también, oh Judá, está preparada una siega, cuando yo haga volver el cautiverio de mi pueblo.

Impenitencia de Israel

¡Vengan, volvámonos al Señor!
Él nos ha despedazado,
    pero nos sanará;
nos ha herido,
    pero nos vendará.
Después de dos días nos dará vida nuevamente;
    al tercer día nos levantará,
    y así viviremos en su presencia.
Conozcamos al Señor;
    esforcémonos por conocerlo.
Tan cierto como que sale el sol,
    él habrá de manifestarse;
vendrá a nosotros como la lluvia de invierno,
    como la lluvia de primavera que riega la tierra.

«¿Qué voy a hacer contigo, Efraín?
    ¿Qué voy a hacer contigo, Judá?
El amor de ustedes es como nube matutina,
    como rocío que temprano se evapora.
Por eso los hice pedazos por medio de los profetas;
    los herí con las palabras de mi boca.
    ¡Mis juicios brillan como la luz!
Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios,
    conocimiento de Dios en lugar de holocaustos.
Pero ellos, como Adán han quebrantado el pacto,
    ¡me han traicionado!
Galaad es una ciudad de malhechores;
    sus pisadas dejan huellas de sangre.
Una pandilla de sacerdotes
    está al acecho en el camino a Siquén
y, como banda de salteadores,
    comete toda clase de infamias.
10 En el reino de Israel he visto algo horrible:
    se ha prostituido a Efraín
    e Israel se ha contaminado.

11 »¡A ti también, Judá,
    te espera la cosecha de tu maldad!

»Cuando yo restaure la fortuna de mi pueblo