Luego oí otra voz del cielo que decía:

«Salgan de ella, pueblo mío,
    para que no sean cómplices de sus pecados
    ni los alcance ninguna de sus plagas;
pues sus pecados se han amontonado hasta el cielo
    y de sus injusticias se ha acordado Dios.
Páguenle con la misma moneda;
    denle el doble de lo que ha cometido,
    y en la misma copa en que ella preparó bebida
    mézclenle una doble porción.
En la medida en que ella se entregó a la vanagloria y al arrogante lujo
    denle tormento y aflicción;
porque en su corazón se jacta:
    “Estoy sentada como reina;
    no soy viuda ni sufriré jamás”.

Read full chapter

Oí entonces otra voz del cielo, que decía: «Ustedes, los de mi pueblo, salgan de esa ciudad(A) para que no participen de sus pecados ni reciban parte de sus plagas; pues son tantos sus pecados que llegan hasta el cielo,(B) y Dios ha tomado en cuenta sus injusticias. ¡Páguenle ustedes con la misma moneda!(C) ¡Denle a beber en la misma copa el doble de la bebida que ella preparó! ¡Páguenle con tantos tormentos y llanto como el esplendor y las riquezas en que ha vivido! Porque en su corazón dice: “Estoy en mi trono de reina; no soy viuda, y jamás experimentaré el sufrimiento.”

Read full chapter

17 Por tanto, el Señor añade:

«¡Salgan de en medio de ellos
    y apártense!
No toquen nada impuro
    y yo los recibiré».[a]

18 Y:

«Yo seré un Padre para ustedes
    y ustedes serán mis hijos y mis hijas,
    dice el Señor Todopoderoso».[b]

Read full chapter

17 Por lo tanto, el Señor dice:

«Salgan de en medio de ellos, y apártense;
y no toquen lo inmundo;
y yo los recibiré.(A)
18 Y seré un Padre para ustedes,
y ustedes serán mis hijos y mis hijas.»
Lo ha dicho el Señor Todopoderoso.(B)

Read full chapter