Add parallel Print Page Options

Oración vespertina de confianza en Dios

Para el director del coro[a]; para instrumentos de cuerda. Salmo de David.

Cuando clamo(A), respóndeme(B), oh Dios de mi justicia.
En la angustia me has aliviado[b](C);
ten piedad de mí(D), escucha mi oración(E).

Hijos de hombres, ¿hasta cuándo cambiaréis mi honra[c](F) en deshonra(G)?
¿Hasta cuándo amaréis la vanidad[d](H) y buscaréis la mentira(I)? (Selah[e])
Sabed, pues, que el Señor ha apartado[f](J) al piadoso(K) para sí;
el Señor oye cuando a Él clamo(L).

Temblad[g](M), y[h] no pequéis(N);
meditad[i] en vuestro corazón sobre vuestro lecho(O), y callad. (Selah)
Ofreced sacrificios de justicia(P),
y confiad en el Señor(Q).

Muchos dicen: ¿Quién nos mostrará el bien(R)?
¡Alza, oh Señor, sobre nosotros la luz de tu rostro(S)!
Alegría pusiste en mi corazón(T),
mayor que la de ellos cuando abundan su grano y su mosto.
En paz me acostaré y así también[j] dormiré(U);
porque solo tú, Señor, me haces habitar seguro(V).

Footnotes

  1. Salmos 4:1 I.e., Que pertenece a la antología del director del coro
  2. Salmos 4:1 Lit., me has hecho lugar
  3. Salmos 4:2 O, gloria
  4. Salmos 4:2 O, lo que no es de valor
  5. Salmos 4:2 Posiblemente, Pausa, Crescendo, o Interludio
  6. Salmos 4:3 Una variante es: ha tratado en forma maravillosa
  7. Salmos 4:4 I.e., de ira o temor
  8. Salmos 4:4 O, pero
  9. Salmos 4:4 Lit., decid
  10. Salmos 4:8 O, al mismo tiempo

Oración vespertina de confianza en Dios

Al músico principal; sobre Neginot. Salmo de David.

Respóndeme cuando clamo, oh Dios de mi justicia.

Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar;

Ten misericordia de mí, y oye mi oración.

Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volveréis mi honra en infamia,

Amaréis la vanidad, y buscaréis la mentira? Selah

Sabed, pues, que Jehová ha escogido al piadoso para sí;

Jehová oirá cuando yo a él clamare.

Temblad, y no pequéis;(A)

Meditad en vuestro corazón estando en vuestra cama, y callad. Selah

Ofreced sacrificios de justicia,

Y confiad en Jehová.

Muchos son los que dicen: ¿Quién nos mostrará el bien?

Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro.

Tú diste alegría a mi corazón

Mayor que la de ellos cuando abundaba su grano y su mosto.

En paz me acostaré, y asimismo dormiré;

Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.