Add parallel Print Page Options

Él dijo: «En medio de tu angustia me llamaste y yo te salvé; desde el nubarrón te respondí. En Meribá puse a prueba tu fe, cuando te quejaste por falta de agua. Escúchame, pueblo mío, mientras te doy serias advertencias: ¡Ay Israel, si tan sólo me escucharas! No tendrás ningún dios extranjero, ni te inclinarás ante ningún dios extraño.

Read full chapter

En la calamidad clamaste, y yo te libré;

Te respondí en lo secreto del trueno;

Te probé junto a las aguas de Meriba.(A) Selah

Oye, pueblo mío, y te amonestaré.

Israel, si me oyeres,

No habrá en ti dios ajeno,

Ni te inclinarás a dios extraño.(B)

Read full chapter