Add parallel Print Page Options

10 Señor, aquí tienes a tus enemigos,
a los enemigos que han de perecer,
a los malvados que se dispersarán.
11 Pero tú me has dado la fuerza del búfalo,
me has ungido con aceite nuevo.
12 Mis ojos verán caer a mis rivales,
mis oídos se enterarán
de quiénes son los que me atacan.

Read full chapter

10 Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo;

Seré ungido con aceite fresco.

11 Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos;

Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos.

12 El justo florecerá como la palmera;

Crecerá como cedro en el Líbano.

Read full chapter