En mi niñez, estando con la gente de la tribu de mi padre, oía decir que tú, Señor, escogiste a Israel entre todas las naciones y a nuestros patriarcas entre todos los antepasados, para que fueran tu propiedad eterna, y que les cumpliste todo lo que les habías prometido.
[17l] »Cuando yo era niña, me enseñaron que tú eres nuestro Dios; que somos tu pueblo elegido entre todos los pueblos de la tierra. Tú elegiste a nuestros grandes líderes, y les cumpliste todas tus promesas. ¡Somos tuyos para siempre!