Tú lo sabes todo, y sabes que si no me arrodillé delante del orgulloso Amam, no fue por soberbia, orgullo o ambición; tú sabes que, por la salvación de Israel, estaría dispuesto hasta a besarle las plantas de los pies.
[17d] »¡Tú sabes todo lo que sucede! Sabes que no he querido dar honor al orgulloso Amán, pero no por creerme más importante. Si yo supiera que haciéndolo podría salvar a Israel, no dudaría en besarle los pies.